El Heraldo
Sociedad

Aida Bossa homenajea a las tías del Caribe

La artista cartagenera contó detalles de la bioserie ‘Leandro Díaz’, su interacción con Silvestre Dangond y los sacrificios que ha hecho en su vida. 

Generosidad”. Esa es la palabra que la actriz y cantautora cartagenera Aida Bossa utiliza para definir su personaje de Erótida Duarte en la bioserie Leandro Díaz que está al aire por el Canal RCN.

La tía Erótida con su sacrificio se convierte en un rayo de luz en el oscuro mundo que le tocó vivir al juglar que nació ciego. 

Ella deja todo de lado para entregarle sus mejores años a Leandro y mostrarle la vida desde la óptica del amor. Es precisamente el amor el que se le termina tornando esquivo a esta abnegada mujer que en el camino le toca toparse con relaciones sentimentales complicadas.

Su interpretación se convirtió en un homenaje a las tías del Caribe colombiano, esas que se convierten en las cómplices ideales y que con sus sabios consejos son vitales en la formación de muchas personas.
En diálogo con EL HERALDO la artista que es recordada por su protagónico en la bioserie de Déjala morir, en la que encarnó a Emilia Herrera, La Niña Emilia, se mostró dichosa porque la vida le regaló la oportunidad de participar en otro proyecto costeño que le permite contar historias reales ligadas a nuestros músicos.

Reveló su faceta de tía en la vida real, y todo el cariño que le entrega sus tres sobrinos, lo gratificante que fue compartir escenas con Silvestre Dangond, y lo especial que fue explorar el sur de La Guajira.

P.

¿Cómo es Aida Bossa en su papel de tía en la vida real?

R.

Pues lo disfruto mucho, tengo tres sobrinos: Sara Margarita, de 5 años, Samuel que acaba de nacer y Kiara que tiene 19 años, con ella solo compartí cuando estaba grandecita, pero mi pechiche es Sara Margarita, para ella soy la tía ‘Aidy’. Con ella converso mucho por teléfono, ella vive en Cartagena y yo en Bogotá, así que me toca disfrutarla al máximo cuando voy por allá, juego con ella, le canto y hacemos castillos en la playa.

 

P.

La tía Erótida sacrificó mucho por el bienestar de Leandro, ¿Aida qué ha tenido que sacrificar?

R.

Creo que en la vida constantemente uno está sacrificando cosas, pues el acto de ser mamá es un es un gran sacrificio, y un sacrificio que realmente uno hace por amor. El hecho de que tu cuerpo esté cien por ciento disponible para la llegada de ese nuevo ser, es un gran acto. A mí desde mi profesión me ha tocado sacrificar mucho tiempo al lado de mi familia, muchas veces por los rodajes me he alejado de mi hija Mikaela, pero ya esos son códigos que uno establece en la familia, ya mi hija lo sabe.

P.

Se ha visto en pantalla un papelazo de su parte ¿Cómo logró construir a la tía Erótida?

R.

Nosotros teníamos un referente que era el libro Leandro de Alonso Sánchez Baute, yo me agarré de ese testimonio que le entregó el propio Leandro sobre su tía Erótida para armar el personaje. No tuve la fortuna de hablar con su hijo Ivo, porque siempre ocurría algo que lo impedía, así que construí a Erótida con ese referente, también vi un par de entrevistas más en las que explicó que ella era la luz en su camino.

P.

¿Qué tiene Aida Bossa de la tía Erótida?

R.

Pues uno siempre les entrega a los personajes todo su ser, porque uno de actor tiene que ser muy buen observador y sobre todo muy sensible. Este tipo de historias creo que también las hemos vivido de alguna u otra forma en el Caribe, donde las tías son una figura muy importante. Más allá de lo que pueda tener Aida del personaje o no, porque sí tuve una conexión muy especial con la tía Erótida por su generosidad, ella es un ser compasivo que me cautivó. Se me es difícil pasar al lado de alguien que se ha caído y no darle la mano, y la tía Erótida es ese ser compasivo que siempre estuvo para Leandro. Yo tuve una especie de tía Erótida, se llamó Ileana Bustamante, cuando fui mamá me ayudó en la crianza de mi hija, recién parida fue un ángel en el camino, trasnochaba conmigo y cuando debía grabar se encargaba de la niña.

P.

Vemos a una Erótida aguerrida, que no le temé a Onofre ¿Cómo lo enfrentó?

R.

Lo que uno menos debe hacer como actor cuando empieza a interpretar cualquier personaje es juzgarlo, así sea el más perverso, no debes juzgarlo, porque cada uno tiene una vida, un camino y una historia diferente, nadie dice que va a ser malo porque sí, detrás de él se esconden muchos dramas también.

Onofre es su hermano, pero también refleja esas diferencias entre hermanos que siempre ha existido. Con Diego Vásquez (actor que interpreta a Onofre) tuvimos conversaciones con muchos momentos de compasión que nos permitieron comprender mejor la realidad de cada personaje. Ahora Erótida vendrá a cuidarle a Urbano que también se va queda ciego, así que vuelve y juega...

P.

Erótida leía mucho ¿Qué tanto lo hace Aida?

R.

 Ella quería ser maestra, por eso leía demasiado y gracias a la lectura fue una mujer transgresora para su época. Yo también leo, cuando hacía teatro lo hacía mucho más, porque leer es fascinante, incluso hace poco comencé a leer libros de Psiquiatría para entender el cerebro de los adolescentes, porque uno es papá y entra en otros viajes, así que me disfruté muchísimo esa faceta de lectora de Erótida.

P.

Le tocó afrontar una relación sorpresiva con Tomás quien resultó ser homosexual ¿Cómo recrearon las escenas?

R.

Para mí fue algo maravilloso poder contar esa historia, a mí me toca mucho y es un tema muy sensible porque uno debe tomar partido y lo hago todo el tiempo con aquel amigo homofóbico, el tema de la igualdad me mueve mucho.

En esa época ser homosexual era un delito y me tocó buscar libros de Derecho de la época para comprender el contexto y realmente era espantoso, por fortuna pudimos mostrar a una mujer que apoyó mucho a Tomás a lograr sus sueños y lo defendió ante el resto de la sociedad, que es muy egoísta. Pienso que el tema religioso también nos ha hecho mucho daño, nos ha ido bloqueando y la televisión que llega a las masas nos permite mostrar realidades, por ejemplo esa escena donde iban a linchar a Tomás por ser homosexual, eso es algo que hoy aun ocurre en algunos lugares.

P.

¿Cómo fue su relación con Silvestre Dangond, que es un actor natural?

R.

Silvestre desde el primer ensayo que tuvimos, que fue una lectura, me logré conectar con él porque fue muy sensible, le entregó su verdad a Leandro. Él no actuó y para mí eso fue lo mejor porque el actor que empieza a actuar la embarra, es irónico, pero es así. Silvestre escucha mucho en escena y eso me pareció genial.

 

P.

¿Este papel de Erótida hace parte de su Top 3?

R.

Yo siento que cada oportunidad que le llegue a uno de hacer un personaje que permita contar historias importantes es bienvenido, espero que lleguen muchos más, pero a todos les he dado la importancia que se merecen, el papel de Erótida me gustó mucho porque está ligado a un juglar de nuestra música vallenata y la costa, es que nuestras historias no son solo de narcotráfico, tenemos historias muy bellísimas por contar.

 

P.

¿Hacer papeles costeños le resultan más fáciles de interpretar o por el contrario la exigen al máximo?

R.

Me exigen más, porque es una responsabilidad muy grande, el Caribe es muy diverso, incluso en sus propios acentos, hablar con esa cadencia y musicalidad de las personas del sur de La Guajira, fue todo un reto. Aquí en la costa tenemos historias bellísimas que merecen ser contadas, con nuestros músicos, escritores, pintores, así que necesitamos contarlas con talentos costeños, así que considero un regalazo del universo hacer parte de esta producción llamada Leandro Díaz, quiero llevar a mi esposo y a mi hija al sur de La Guajira, hay muchas partes del país que deben ser mostrada, a uno no le hablan del sur de La Guajira, solo del Cabo de La Vela, que también es bello, pero regiones como estas son muy lindas. Incluso me duele mucho el abandono del Estado, he visto en los últimos días videos que muestran el desbordamiento del río Ranchería y tiene a Caracolí, un corregimiento de San Juan del Cesar, La Guajira, bloqueado. Los profesores no pueden ir a dictar las clases y todos los problemas que se muestran en la televisión son los de Bogotá, pero lo que está pasando en las regiones es de cuidado, porque ahí es donde está el verdadero tesoro de nuestro país. 

La tía Erótida junto a Tomás Morales. Cortesía
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