Benicia Tuirán de Rebollo, madre de la monteriana Yenni Rebollo, asesinada el 25 de mayo de 2013 en un gimnasio de Bilbao, España, viajará a ese país para asistir al juicio que comienza este viernes contra el asesino de su hija, el falso monje shaolín Juan Carlos Aguilar.
La progenitora de Jenni sigue vestida de luto, en su casa de esquina del barrio Caribe, este de Montería, y cuando habla de los hechos , todavía llora como el primer día en el que recibió la fatal noticia.
Va con una hija
'Voy a viajar a ese juicio acompañada de Mónica, otra de mis hijas, porque quiero escuchar con mis propios oídos cuántos años de condena le van a dar a ese señor, si se le puede llamar señor', dijo al mediodía la mujer, que se recupera de un tratamiento de cálculos renales.
Sostuvo que pide la máxima condena o cadena perpetua para el hombre que después de asesinar a su hija, descuartizó su cuerpo sin importarle que dejaría dos niños huérfanos. El mayor de ellos, de 8 años, está en Montería bajo custodia de su abuela materna.
'Un monstruo como ese no debe seguir viviendo en sociedad', sostiene Benicia, mientras señala las paredes que logró construirle su hija Yenni, con el dinero que ganaba como estilista en Bilbao.
Advierte que en pocos días se van a cumplir dos años del homicidio de su hija y su corazón sufre cada día que pasa por la pérdida de su hija. Cuenta que todos los domingos le lleva flores al cementerio donde reposan sus cenizas.
Proceso lento
'Con ningún dinero me reparan la vida de mi hija, para mí la justicia española estancó un poco el caso porque mi hija va a cumplir dos años de asesinada y ahora es cuando lo van a condenar', advirtió.
La familia Tuirán Rebollo contrató a un abogado de Valencia (España), quien se encarga de los trámites y quien precisamente los llamó para ponerlos al tanto del inicio del juicio.
El falso monje también será juzgado en el Tribunal de Bilbao por el asesinato de la nigeriana Maureen Ada Otuya, ocurrido días antes del caso de Yenni.





















