Los familiares de Andrés Manuel Narváez Arrieta le restan credibilidad a la versión que da cuenta que este se quitó la vida ahorcándose en uno de los baños de la Clínica de Salud Mental y Rehabilitación Integral Manantiales, en Sincelejo.
El hecho, según un comunicado de prensa entregado por la gerente de dicho ente de salud, Ana María Peña Ordosgoitia, se habría presentado entre la noche del sábado y la madrugada de ayer.
Narváez Arrieta, de 33 años, padre de dos hijos, nativo del municipio de Los Palmitos (Sucre) y quien laboraba en la ciudad de Cartagena como albañil había presentado quebrantos de salud desde la semana anterior cuando se le presentó un fuerte dolor abdominal y tras ser valorado por médicos en esa ciudad le detectaron una infección urinaria que podía ser manejada desde su casa.
Sin embargo, dijo su esposa Ericka Zurique, el dolor persistió y en razón a ello un hermano suyo lo fue a buscar y se lo trajo para Los Palmitos donde fue llevado al centro de salud local donde su estado de salud empeoró por la acción de unos medicamentos, por lo que fue remitido al Hospital de Corozal donde Andrés Manuel Narváez Arrieta se mostró agresivo y por eso decidieron enviarlo a la Clínica de Rehabilitación, algo en lo que su familia nunca estuvo de acuerdo.
'No podemos creer nosotros que un dolor abdominal haya dado para que él se quitara la vida, eso nunca lo pensó, por eso no le damos credibilidad a esa versión y pedimos a las autoridades que investiguen', dijo Ericka Zurique ayer en la casa de sus suegros en el barrio Once de Noviembre de Los Palmitos.
La inspección técnica del cadáver fue realizada por personal del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía desde las 4:30 de la mañana.
Este es el suicidio número 31 que se presenta en Sucre y el noveno en Sincelejo.