“En el Tolima me han dado la confianza que no se tuvo en Junior”: Alberto Gamero
El timonel samario, de 54 años, habló ayer con EL HERALDO de su gran presente en el equipo pijao, actual campeón del fútbol colombiano y líder de la Liga Águila II-2018, y de su paso en falso en el equipo rojiblanco.
Alberto Gamero charla tranquilo con sus colaboradores. Luego bromea con varios de sus jugadores en un ambiente bastante distendido, después del almuerzo tomado ayer en la concentración del Deportes Tolima, en el Hotel Sonesta, en el norte de la ciudad.
“Me quedaste mal con las boletas”, le dice Marco Pérez. “Ve al otro, Robayo”, responde el entrenador samario, con la complicidad del volante bogotano, de 34 años. “Está loco profe, no hay boleta”, expresa ante la mirada cómplice del asistente técnico Orlando Rojas, quien no logra contener la risa.
La gran conexión que existe entre el plantel y el DT es evidente, y es uno de los principales motivos que explican el gran presente del equipo ‘Vinotinto y Oro’ en el fútbol colombiano, según manifiesta el propio Alberto Gamero. “Eso, sumado a la confianza y a la continuidad, te da pie para realizar un trabajo tranquilo y para que las cosas, seguramente, salgan mucho mejor”, dice con convicción el entrenador samario de 54 años.
En diálogo con EL HERALDO, Gamero habla de su Tolima campeón (en el primer semestre) y hoy líder de la Liga Águila II. El samario, además, repasa su corto paso por el Junior, en el que no logró desarrollar un proceso que le permitiera consolidar su trabajo.
¿Cuál es el secreto de este Tolima, actual campeón del fútbol colombiano y líder de la Liga Águila II-2018?
Como les digo a todos, el gran secreto es el trabajo, la voluntad y las ganas que le ponen los jugadores. Cuando el jugador está dispuesto a hacer las cosas, a los entrenadores se nos facilita un poco más nuestra labor.
El Tolima pareciera que le trae buena suerte a Gamero. Con el equipo pijao ya logró un título de Copa, un título de Liga, un subcampeonato y hoy es líder de la Liga Águila II-2018. ¿Qué tiene de especial este equipo en el que se siente tan cómodo trabajando?
Sonará agrandado, pero la verdad es que a donde yo he ido me ha ido bien. En el Chicó FC me fue supremamente bien. Con las Águilas Doradas duré un torneo y llegué hasta semifinales. Con Junior duré dos meses y medio, así que yo no valoro esa campaña, ni en la hoja de vida la meto (risas). Y con el Deportes Tolima los resultados saltan a la vista. Yo creo que esto es de trabajo, de sacrificio, del día a día.
Analizando lo que dice, la clave ha estado en la continuidad que le han dado a su trabajo. Cuando lo respaldan, se han visto los resultados…
Exacto, la continuidad. Nosotros los técnicos no somos magos, somos técnicos. En el Tolima se ha realizado un trabajo y se ha tenido una continuidad que ha dado frutos. El respaldo y la confianza de don Gabriel Camargo, quien es la cabeza visible de esto, ha sido clave. Simplemente eso. Cuando uno tiene el respaldo y la confianza de un directivo y el directivo sabe qué es lo que le puede dar uno, aparte de los resultados, se puede trabajar tranquilo. De lo contrario, es muy difícil, como ya se ha visto.
¿Sueña con el bicampeonato? ¿Es posible?
Nosotros estamos trabajando para eso. Es un reto muy duro que tenemos y que nos propusimos. Vamos a ver si nos alcanza. Lo que es claro es que vamos a hacer el intento. No va a ser fácil porque hay equipos grandes obligados a pelear por el título, que quieren ir a una Copa Libertadores, pero al grupo lo veo mentalizado y dispuesto a intentarlo.
¿Enfrentar al Junior es un partido especial para usted?
No, es un partido normal.
¿Luego de ese paso en falso en Junior, encontró en el Tolima ese nuevo aire que necesitaba para volver a reinventarse?
Cuando se me dio la oportunidad otra vez en el Tolima encontré a un directivo que cree en lo que estoy haciendo. Acá me abrieron nuevamente las puertas y me dieron la confianza que de pronto no se tuvo acá (en Junior). Ahí estuvo la diferencia. El respaldo y la continuidad son dos aspectos muy importantes para un técnico. Uno tiene que alcanzar a conocer a sus jugadores y alcanzar a conocer el equipo para luego introducir variantes tácticas en la cancha. Eso es lo que tiene hoy el Deportes Tolima. Yo conozco este equipo a la perfección y los jugadores saben a qué juego, cómo jugamos y qué modificaciones hacemos.
¿Le dolió la forma como salió del Junior?
Yo te soy sincero, a mí no me ha dolido eso. No me ha dolido porque después que salí del Junior mis éxitos han seguido. Primero llegué a una semifinal de Liga —fue eliminado por Santa Fe— y luego salí campeón con el Tolima. De pronto me hubiera frustrado si al salir del Junior ellos hubiesen salido campeones y yo no. Lo digo muy respetuosamente, del 2017 hasta acá los éxitos los he tenido yo.
¿Terminó bien su relación con la familia Char?
Sí, terminó bien. Cuando yo hablé con ellos, antes de irme, les dejé mis puertas abiertas. Les dije que esa decisión que habían tomado la respetaba, pero no la compartía. Cuando me fui de aquí y llegué a la semifinal, le escribí a uno de ellos y me contestaron. Lo mismo el semestre pasado cuando fui campeón. Con Héctor Fabio Báez tengo una muy buena relación. Esto no es de amarguras, esto es de momentos.
Tras su salida del equipo rojiblanco se habló mucho de que algunos jugadores se le habían parado. ¿Esto realmente sucedió?
En Junior simplemente no se dieron las cosas. Luego de trabajar dos meses y 22 días, que fue lo que duré acá, me fui tranquilo. No tuve ningún inconveniente ni con los jugadores ni con nadie.
¿Sueña con una revancha en Junior?
En mí no existe la palabra revancha. Las revanchas son conmigo mismo. Yo siempre quiero mejorar, quiero evolucionar, siempre aspiro a cosas buenas y esa es la revancha que yo tengo. Porque decir revancha es insinuar que yo salí con rabia de Junior. Yo salí bien, salí tranquilo, y si alguna vez se presenta de nuevo la oportunidad de venir, bienvenido sea. Para nadie es un secreto que a todos los costeños les seduce venir al Junior y yo no voy a ser la excepción.
¿Qué análisis hace del presente de este equipo dirigido por Julio Comesaña?
Es un Junior que juega bien. Un Junior que ha tenido una continuidad, porque Julio ya va para dos años trabajando con este equipo. Me parece que es un Junior que sabe a qué juega, que tiene muy buena posesión del balón, un equipo al que le han salido varios jugadores buenos como Luis Díaz, Daniel Moreno. Está nuevamente la aparición de Jarlan, que es un elemento muy importante, pero que tenía rato que no aparecía. Hay cosas importantes en este equipo por la continuidad que se la ha dado a su técnico y me parece que hoy en día es un opcionado para pelear el título.
Comesaña ha tenido en Junior la continuidad que de pronto no se les han dado a otros entrenadores…
(Risas)... Bendecido Julio que tiene esa posibilidad y esa continuidad. Pero vuelvo y repito, ha hecho un trabajo muy bueno.
Imagino que contento con el presente del Unión Magdalena, el equipo de su tierra…
Van muy bien. Yo quiero que el Unión ascienda, es uno de los deseos que tengo, verlo nuevamente en la ‘A’ y algún día dirigirlo. Soy costeño, soy samario, es mi equipo del alma y aspiro algún día dar una mano desde el banco técnico. Están haciendo las cosas bien, ojalá sigan por ese camino y logren por fin el objetivo.
