Después que el futbolista argentino Ángel Di María señalara que desea acabar su carrera en el club Rosario Central, múltiples amenazas de muerte ha recibido la familia del jugador.
Di María, de 36 años debutó en este club en el año 2005, y actualmente milita en el Benfica, de Portugal.
Los medios locales detallaron que el futbolista recibió la amenaza en la casa de su familia en las afueras de Rosario.
Indicaron que un automóvil dejó un cartel frente a la urbanización privada Funes Hills Miraflores en la que suele alojarse Di María, en el que le advierte que ni siquiera el gobernador provincial Maximiliano Pullaro podría garantizar su seguridad si regresa a la ciudad.
'Dile a tu hijo Ángel que a Rosario no vuelva más porque sino le cagamos matando un familiar. Ni Pullaro te va a salvar. Nosotros no tiramos papelitos. Plomo y muertos tiramos', fue el mensaje que le dejaron al padre de Di María.
Por su parte, el jefe de seguridad de la urbanización, Gabriel López, declaró que escuchó cuatro detonaciones.
Luego un Renault Megane se alejó a toda velocidad tras lanzar el paquete de nylon negro. La ciudad de Rosario ha experimentado un intenso aumento de la violencia, del que han sido responsables grupos descritos como 'narcoterroristas'.
Asimismo, el Club Atlético Rosario Central, emitió un comunicado para rechazar las amenazas contra Di María.
'Nos sentimos agraviados, dañados y perjudicados porque este tipo de acciones violentas atentan directamente contra la economía y éxito deportivo de los clubes. No no se puede permitir que quieran amedrentar a los futbolistas o atentar contra ellos y/o sus familiares que son los protagonistas principales de los espectáculos deportivos, así como tampoco se puede permitir la violencia contra ningún actor de la familia del fútbol', escribieron en su cuenta de Instagram.
Sin embargo, este miércoles fueron detenidos los responsables de las amenazas que recibió la familia de Di María.





















