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Con tapabocas y un tarrito de alcohol para desinfectar sus manos, el ciclista barranquillero Nelson Soto retornó a los entrenamientos con su equipo Colombia Tierra de Atletas, delegación patrocinada por el Ministerio del Deporte.

El contacto con la naturaleza y respirar aire fresco, tiene emocionado a ‘El Huracán’, quien dialogó con EL HERALDO luego de permanecer en cuarentena por más de dos meses en Medellín, su actual ciudad de residencia.

'Llevo apenas dos salidas. Trato de estar saliendo lo mínimo posible, solo los días que tengo que hacer carretera porque en el simulador es demasiado duro. Por fortuna tenemos la posibilidad de volver y lo importante es hacerlo con mucha responsabilidad'.

El velocista, de 25 años, hizo énfasis en las exigencias y los documentos que cada ciclista debe llenar para salir a carretera. Uno de los principales requisitos es la prueba de la COVID-19. 'Todos los ciclistas que retomamos los entrenamientos debemos cumplir con unas normas. Nos hicimos una prueba inicial de la COVID-19 para poder salir, firmar unos requisitos, que nos vamos a cuidar, que vamos a tomar las medidas necesarias para evitar el contagio. Nos hacemos las pruebas cada tres semanas, los resultados se mandan a la Federación Colombiana de Ciclismo y acá en el equipo tenemos un médico, Erick Bejarano, el cual anda pendiente de nosotros, de todos los detalles. Cada vez que salimos a carretera llenamos un informe. Es riguroso, pero es lo mejor para controlar este virus que nos afecta. Hasta ahora todo ha salido negativo y seguimos entrenando para estar de la mejor manera'.

El atlanticense contó algunos detalles de cómo fue el proceso de los exámenes en su delegación. 'Simplemente el médico de equipo nos mandó la orden, fuimos al laboratorio y nos hicieron un examen de sangre y ya está. Por fortuna nadie dio positivo. Es un control riguroso para evitar que se propague el virus'.

Para el velocista, quien estuvo corriendo para el equipo Caja Rural de España, no hay comparación entre la carretera y el simulador. 'El ciclismo es un deporte de resistencia y en el simulador hacíamos dos horas, máximo tres. Lo máximo que alancé fueron tres horas y eran eternos. En el simulador es más duro porque no habían bajadas, no hay descanso, siempre estás pedaleando y estás más propenso a lesiones. Se hace grato estar en carretera porque empieza uno a perder motivación encerrado y viendo noticias negativas'.

El campeón Panamericano de Ruta en República Dominicana en 2017, reveló algunos detalles que tiene pensado su equipo en cuanto a competencias. 'Estamos viendo que en Europa empezarán las carreras antes, el equipo espera volver porque cuando empezó la pandemia estábamos en Croacia y nos tocó venirnos casi que corriendo. Estamos pensando en volver allá. No sé aún las fechas, pero seguro serán después de agosto. En Colombia estaremos en la Vuelta a Colombia y el Clásico RCN', concluyó el barranquillero.