El 4 de Julio de 2014 es una fecha que quedará guardada en la memoria de todos los aficionados colombianos. Ese día, en el Estadio Castelao de la ciudad de Fortaleza, se enfrentaron Colombia y Brasil, por los cuartos de final del Mundial Brasil 2014.
Fue un viernes histórico porque nuestro seleccionado accedía por primera vez en su historia a esa instancia de un Mundial de fútbol. Casualmente, el rival tenía los más grandes pergaminos que pueda tener seleccionado alguno: pentacampeones y en su propia casa, en el Mundial que organizaron contra viento y marea para ganarlo y olvidar de una vez por todas aquel fatídico ‘Maracanazo’ en 1950.
Colombia llegó como favorito por un fútbol bien jugado que enamoró a todos, mientras que Brasil olvidó su jogo bonito y era resistido hasta por los mismos brasileros.
Sucedió de todo. Un gol anulado a Mario Alberto Yepes —bien anulado, por cierto, por el árbitro español Carlos Velasco Carballo, pero que sigue siendo tendencia en las redes sociales con el famoso 'Era gol de Yepes'—, faltas brasileras por doquier, tarjetas amarillas que dejó de sacar el central español, la falta de Zúñiga sobre Neymar que sacó al crack del Barcelona del Mundial, la no expulsión del arquero Julio Cesar en el penalty sobre Carlos Bacca y las lágrimas de James que fueron como un puñal clavado en el corazón de los colombianos.
Aunque es un partido amistoso el que jugarán Colombia y Brasil, es inevitable catalogarlo como una revancha. Todo lo que sucedió en el pasado Campeonato Mundial invita a que los aficionados colombianos lo miren de esa manera.
Por eso, el Estadio Sun Life se convertirá en una mancha amarilla de 75000 aficionados, la gran mayoría colombianos que han devorado la boletería. El récord de asistencia para un partido de fútbol en Miami fue de 73148 espectadores que asistieron al Sun Life a ver al Real Madrid ante el Chelsea, el 5 de Agosto de 2013. Ese día el polémico Mourinho, dirigiendo al Chelsea, enfrentaba por primera vez a su antiguo equipo.
Los auriverdes, dirigidos ahora por Dunga, han catalogado el juego como un clásico sudamericano, lo que habla del respeto que le tienen a nuestro combinado nacional. Y saben también que su primer objetivo es volver a enamorar a una afición que tiene el corazón partido en siete pedazos con los goles que le anotaron los alemanes en la semifinal del pasado Mundial.
Y al igual que un hombre cuando está cortejando a una mujer, los jugadores brasileros están haciéndolo con detalles: entrenamientos abiertos, amabilidad en las ruedas de prensa que han sido todos los días, con la posibilidad de hacer entrevistas casi personalizadas, fotos, autógrafos. Pero eso es solo una parte, porque saben que para poder unir el rompecabezas de siete pedazos, en los que quedó el corazón de sus seguidores, tienen que mostrar buen fútbol.
Para eso Dunga pondrá a sus principales hombres en la formación titular, encabezados por Neymar, quien será el capitán de campo ante la ausencia de Thiago Silva por lesión. Algunos de ellos ni siquiera fueron convocados por Scolari en el pasado Mundial, como Tardelli, Filipe Luís, Miranda y Robinho.
Filipe Luís, lateral izquierdo del Chelsea y excompañero de Falcao en el Atlético de Madrid, declaró que se siente complacido por el regreso a la selección del goleador colombiano. 'Es un placer que esté nuevamente al mejor nivel del fútbol mundial y que haya regresado a la selección. Es un jugador con mucha fe, al que admiro muchísimo. Le deseo lo mejor, no ante nosotros, pero sí en todo lo demás', dijo.
Por los lados de Colombia ha sido impresionante la pasión que ha generado la presencia del combinado nacional. Muchos habitantes de Miami se hospedaron en el mismo hotel de concentración solo para estar cerca de los jugadores. Las medidas de seguridad han sido extremas y solo se les ha permitido a los huéspedes el ingreso al hotel, pero tantos están bajados ahí, para conseguir una foto o un autógrafo, que el lobby siempre ha estado repleto de camisas amarillas.
Colombia tendrá seguramente la base de la formación titular que jugó el pasado Mundial, con el retorno de Falcao, a quién se le ha visto feliz de estar de regreso con la selección. 'Estoy muy contento con la nueva oportunidad de estar aquí, después de todo lo que ha vivido el equipo. Es un orgullo. Esperamos en este nuevo ciclo seguir creciendo, porque tenemos desafíos importantes', dijo el jugador samario.
Solo falta esperar si ambos seleccionados afrontan este compromiso como un amistoso más o como una verdadera revancha.
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