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Hay una vieja cauda lectora de estas crónicas nuestras- que hay que decirlo aunque con pena, que ya no son mayoritarios como antes, porque el tiempo no pasa de gratis – que están molestas con esta pluma, porque dicen que hemos 'desertado' del boxeo y el béisbol, para meternos de cabeza en el tema futbolero.

Ya hemos dicho hasta el cansancio que fuimos adictos al fútbol desde niños en el Estadio Moderno, pero al llegar a la mayoría de edad y convertirnos por arte de birlibirlo que en cronistas deportivos, don Carlos Martínez Aparicio, director de La Prensa, nos preguntó que cuales eran los deportes de nuestras preferencias, le dijimos eso: béisbol y boxeo.

Ahora, ya puestos a contentar un poco a los viejos lectores y amantes del boxeo, vemos que nos han puesto un calzonete; nos mandaron a jóvenes que dizque quieren saber 'cual fue el problema surgido, cuando se trajo a Chicharrita Medina, gran peso ligero venezolano, a Barranquilla. Resulta que se había metido a promotor el conocido de entonces Focha Hernández, quien primero fue boxeador amateur y luego referee. Y como se le dio la ventolera de convertirse en promotor, trajo a Chicharrita para que peleara acá con el peruano Di Natale, peso 'welter' que gustaba a los aficionados. Este columnista era vicepresidente de la Comisión de Boxeo y le advirtió a Focha: Mira, siempre hemos sabido que Medina es peso ligero, y por lo mismo DiNatale es muy pesado para él. Exigimos un pesaje previo'. Y dicho y hecho: DiNatale 148 libras y Chicharrita 136. Sentencia: 'Aquí no hay pelea'.

Focha se fue a Cartagena y se trajo a Jack Hernández, quien si era ligero. Y vamos que la noche de la pelea, faltando ya minutos para la estelar nos avisan que hay un problema en el camerino del venezolano. ¿Qué pasa?, le preguntamos y contestó : 'Yo no peleo'. Y pasaba algo mas grave: El promotor se había ido del estadio. Sin embargo, nos enfrentamos a Medina y con voz resuelta le dijimos: No me venga con esa vaina que no pelea, porque lo hago subir al ring con la policía. Ahí hay un público esperando. ¿Y quién me paga a mí? Fue su pregunta. 'Le paga la Comisión de Boxeo', le dijimos, y de inmediato incautamos todas las taquillas y Chicharrita subió al ring y noqueó a Jack Hernández en 3 asaltos.

Esta marañita que estamos recordando al cabo de 42 o 45 años se la ponemos a cualquier Comisión de Boxeo del país, a ver como se hubiera manejado. Chicharrita recibió su paga completa y después del combate era todo sonrisa en su camerino. Y había que oírlo: 'Mañana me compro en el comercio 3 pares de zapatos, dos vestidos y 6 camisas', le dijo a los preliminaristas, que lo miraban con envidia. Confidencialmente, Medina nos dijo: 'No le había advertido al promotor que yo conocía a DiNatali y sabía que era un peso 'Welter', y que si aquí había Comisión de Boxeo no iban a permitir esa pelea'.

Que si había Comisión de Boxeo, Chicharrita? No solo la había, sino que otra como esa no se ha vuelto a ver en este país...

Palestra deportiva, por Chelo De Castro C.