El gol que anotó ayer Falcao García con el Mónaco, ante el Arsenal, seguramente fue cantado por toda Colombia, como cualquiera de los 12 goles de la Selección en el Mundial de Brasil.
El retorno de Falcao a las canchas era el momento más esperado por los aficionados colombianos. Era, además, lo que se quería, que solo reapareciera cuando estuviera plenamente recuperado de la grave lesión que sufrió en enero.
Por eso muchos consideraron que lo más prudente era no llevarlo al Mundial, como en efecto ocurrió, con tal de ser testigos de este momento que nos ofreció este fin de semana: su retorno a las canchas, con gol incluido.
Los otros interesados en ver cómo regresaba el Tigre samario son los equipos que han mostrado interés en ficharle, especialmente el Real Madrid, que en estos cinco meses, antes de que se abra el mercado de pases de invierno, tratará de llenarse de razones para darle vía libre a la operación.
Por lo pronto, el Mónaco ha dicho que Falcao se queda y tal vez sea entendible. Después de recibir 80 millones de euros por la transferencia de James Rodríguez, respiran tranquilos y se dan el lujo de esperar una oferta igual o mayor por Falcao García.
