Édinson Toloza no es el primero ni será el último jugador resistido por los seguidores de Junior. En la historia de los Tiburones, y para no ir a las películas en blanco y negro, hay varios futbolistas que fueron rechazados y descalificados por la tribuna: Rolando Campbell, Luis Grau, Héctor Méndez, Carlos Araújo y Luis Carlos Ruiz, entre otros.
Ahora Toloza también ocupa una posición principal, nada envidiable, en ese ‘selecto’ grupo. Su alta autoestima y poses ‘tolotellitescas’ lo llevan a ser desafiante ante los reclamos airados de los aficionados, que lo repudian enervados por sus limitaciones técnicas para definir.
Lo que ocurre no es algo exclusivo de Barranquilla, en otras latitudes sucede lo mismo. El público es pasional en su gran mayoría y sus altibajos emocionales están determinados por las circunstancias de un partido o de un jugador. Si el equipo preferido hace una extraordinaria presentación, es el mejor, y si juega un pésimo partido, definitivamente es incompetente. Igual ocurre con un jugador, si actúa bien, si hace el gol del triunfo, tendrá su reconocimiento, de lo contrario será vituperado, el fútbol es de odios y amores, en un minuto se pasa del infierno a la gloria o viceversa.
La diferencia entre este nuevo integrante de la lista de los ‘desplazados’, es que los anteriores no eran respondones, algunos tenían carácter y se dedicaban a jugar o a cumplir la tarea asignada por el entrenador, otros eran algo débiles mentalmente y se fueron rápido del balompié.
Toloza es irreverente, es inmodesto, está convencido de que es el mejor. Todo eso le sirve de coraza para jugar sin importar lo que venga de afuera, al fin de cuentas él presiente que cuando anote un gol o coloque un pase gol, paliará las ofensas.
Difícilmente tendrá una luna de miel con los hinchas, pero sí podrá ser deseado en algún instante. Recuerden aquel 21 de mayo de 2014 en la final ante Nacional en Medellín, después de haber empatado el partido debió irse por una lesión. Junior perdió esa final y el comentario generalizado fue: “Si Toloza no se lesiona, Junior le gana al Nacional”.
Hay algo que es indiscutido, Toloza es más lo que erra, que lo que acierta, pero no se le puede desconocer, que en la cancha es incansable, nunca se queda quieto, es el que más desgasta a las defensas rivales, es fuerte y potente, pero lamentablemente siempre juega en quinta velocidad, no desacelera y por eso malogra tantos goles.
Toloza va a marcar goles, menos de lo que realmente tendría que marcar si enumeramos las múltiples oportunidades que se le presentan por partido, pero hay que llenarse de paciencia y tolerancia. Hay que dejar jugar al moreno. Toloza es un ‘mal necesario’.








