A bordo de un helicóptero Mil Mi-17, de fabricación rusa, proporcionado por la ONU, inició el proceso de entrega de los cofres en los que reposan los cuerpos de las víctimas de la masacre de Bojayá.
Entre el 11 y el 18 de noviembre, la Unidad para las Víctimas, la Oficina en Colombia del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, el Centro Nacional de Memoria Histórica, la Fiscalía General de la Nación y el Instituto de Medicina Legal, participarán en el acto de entrega formal de los muertos de la masacre del 2 de mayo del 2002 en Bojayá, Chocó. Los cuerpos fueron exhumados por segunda vez en mayo de 2017 para lograr su identificación.
Este 11 de noviembre comenzó el proceso de la llegada de los cuerpos, el velorio y el entierro colectivo de 79 cuerpos. Desde el aeropuerto Olaya Herrera, en la ciudad de Medellín, el director de la Unidad para las Víctimas, Ramón Rodríguez, aseguró que 'gracias a los helicópteros de las Naciones Unidas vamos a llegar a Vigía del Fuerte y allí vamos a entregar los cuerpos a las comunidades, para que pueda iniciar el proceso de duelo'.
Ahora que los cuerpos de las víctimas de esta masacre, ocurrida en el 2002, en el departamento de Chocó, se encuentran en su tierra, iniciarán un recorrido por Vigía del Fuerte, Bellavista (Viejo), Bellavista (Nuevo), Pogue y las demás comunidades rivereñas, donde recibirán un homenaje y su último adiós.
Luego de las explicaciones técnico-científicas, el 16 de noviembre se cumplirán los actos y ritos. 'Como Unidad para las Víctimas acompañaremos los actos de entierro final, nosotros realizaremos todo el acompañamiento por parte del equipo psicosocial, hoy lo que haremos es entregar estos cuerpos y se inicia un proceso de acompañamiento para que las comunidades realicen los rituales de acuerdo a sus usos y costumbres', explicó el director de la entidad.
Millonaria inversión para entierro final y rituales
Con el fin de cumplir con las características diferenciales de esta comunidad étnica, la Unidad para las Víctimas dispuso de más de 1.500 millones de pesos con el fin de garantizar la participación de los familiares directos de las víctimas de la masacre de Bojayá, que estarán presentes del 11 al 19 de noviembre en los actos de entrega formal de los muertos en este hecho violento.
El director de la Unidad para las Víctimas, Ramón Rodríguez, explicó que con dichos recursos se asegurará que los familiares directos de las víctimas (cónyuges, padres, hijos, hermanos, sin importar el número) o máximo 5 personas por víctima para los casos que no existan familiares directos, participen de todos los actos. 'Bajo sus principios y sus costumbres, la Unidad para las Victimas apoyará este proceso, que nos demanda una inversión entre 1.500 y 2.000 millones de pesos con los que estamos garantizando el transporte de las comunidades, la alimentación y alojamiento de todos los días que ellos requieren', agregó.