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Si en nuestro país fuéramos más sensatos, a James Rodríguez, en adelante ‘Yeims’ (por eso del glamour), ya le estuviéramos colgando una medalla con uno de estos títulos rimbombantes como ‘embajador turístico de Colombia’. Lo digo en broma, por supuesto. Y es que al 10 y flamante capitán de la Selección no se le ocurrió otra cosa, siempre atendiendo a informaciones de prensa española amparadas en fuentes policiales, que decir que no atendió el alto del vehículo de policía camuflado, como se conoce en España cuando el carro no está rotulado con el nombre y distintivos del cuerpo de seguridad correspondiente, porque en su lindo país Colombia –lo de “lindo” es cosecha mía–, “el secuestro es una práctica habitual entre conductores de coches de alta gama”, como era su caso. Claro, después de haber dicho, primero, que no escuchó la sirena y el altavoz que pedía insistentemente que se detuviera al ser pillado conduciendo a 200 kilómetros por hora en Madrid, “porque llevaba la música alta”.

El primer regate no le salió bien a ‘Yeims’ y el segundo bastante peor. Las dos razones expuestas por el infractor, pendiente de juicio por un delito contra la seguridad vial, son tan ridículas como increíbles. No escuchó el alto policial por el ‘picó’ a todo timbal, pero ¿tampoco vio por el retrovisor la señal luminosa azul?

Y luego escudarse en las “estadísticas” de secuestros de Colombia en situaciones parecidas al de su momentazo en Audi, me imagino contrastadas con autoridades nacionales, para tapar su metedura de guayo, me parece triste y lamentable. Lo dicho, menuda promoción del país. ¿No era más fácil zanjar el incidente con disculpas públicas asumiendo la responsabilidad? Como colombiano y periodista residente en España, dicha actitud me sentó muy mal. No sé la prensa de Colombia qué piensa. Ojo al Cristo, que días antes ‘Yeims’ ya había sido blanco de críticas por su supuesto gusto por la vida nocturna, aunque todo hay que decirlo, Rafa Benítez, su entrenador en el Real Madrid hasta hace nada, apuntaba que “James es un buen chico”. Benítez tiró el salvavidas a pesar de que mantenía una relación distante con el jugador, tanto, que ‘Yeims’ no ha disfrutado de tantos minutos sobre el campo esta temporada como con Ancelotti.

Álex Salebe Rodríguez