Todos los inventos son producto de la genialidad humana, pero no necesariamente son el resultado de un propósito inicial. Decenas de aparatos y productos creados a lo largo de la historia, que son utilizados en la actualidad, fueron descubiertos gracias al azar.
Algunas de estas invenciones o servicios han sido útiles para la sociedad como medicamentos para curar enfermedades, aparatos para preparar la comida y bebidas, entre otros.
Estos resultados de carácter fortuito hacen parte de lo que se conoce como serendipia, concepto o término no aceptado por la Real Academia Española (RAE), que designa un 'descubrimiento o un hallazgo afortunado e inesperado que se produce cuando se está buscando otra cosa distinta'. La Fundación del Español Urgente (Fundéu BBVA) afirma en su portal que el término 'Serendipia tiene bastante uso y se puede considerar correcto' y si el contexto lo permite, también es posible utilizarlo como sinónimo de chiripa.
A continuación EL HERALDO comparte una lista de 5 hallazgos afortunados que se produjeron por accidente: