Al ritmo de Musa original, La tumbatecho y La rebelión fue presentada ayer en el centro de la ciudad la estatua en homenaje a Joe Arroyo, que desde ahora acompañará a los visitantes de la plaza que lleva su nombre.
La escultura de 3 metros y 20 centímetros, elaborada en resina de carbono con pátinas en bronce y cobre, se convertirá en adelante en la excusa perfecta para que cartageneros y visitantes recuerden el legado artístico de este músico nacido en las entrañas de la Heroica.
Su escultor, el arquitecto cartagenero Óscar Noriega, aseguró que con esta representación del emblemático músico cartagenero solo intentó rendir tributo a uno de los artistas más grandes e influyentes del Caribe, quien con sus notas obligó al mundo a posar sus ojos no solo en Cartagena, sino en toda Colombia.
La presentación de la única escultura en gran formato que tiene Joe Arroyo en la ciudad que lo vio nacer hace 58 años estuvo a cargo de alcalde Dionisio Vélez, quien en forma de homenaje a la mujer que crio a Joe, su tía Aida Cueto, cedió el turno para que fuera esta quien revelara finalmente la estatua.
'Estoy muy feliz porque sé que todos los cartageneros se sienten muy orgullosos de lo que alcanzó Álvaro', aseguró visiblemente conmovida la mujer que llegó desde el barrio Nariño acompañada de su esposo, Jairo Ortega, y sus hijos.
Seguidores de Joe Arroyo, coleccionistas de salsa y cartageneros que crecieron con las notas del Centurión de la Noche se aglomeraron desde temprano en la plaza, conocida antiguamente como la Plazoleta Olímpica, para ver por primera vez la escultura que fue planeada desde hace dos años, luego de la muerte del artista.
Al evento también asistieron la exesposa de Joe, Jaqueline Ramón; los hermanos del artista, Jairo e Ignacio Arroyo; y los músicos Wilson Saoko, Michi Sarmiento y Wachi Meléndez. 'Joe Arroyo está inmortalizado en la historia por su música, y hoy quedará inmortalizado para todos los cartageneros', expresó quien fuera la segunda voz de la orquesta La Verdad: Wachi Meléndez.
No todos quedaron contentos. Pese a que el evento estuvo cargado de mucha emotividad, para algunos de los asistentes los retrasos en la agenda, más de dos horas, y la ubicación de la estatua empañaron la jornada. 'Me parece perfecto que Joe tenga su estatua en Cartagena, pero es terrible que hayan escogido un lugar como este, donde funciona una planta de aguas residuales y donde siempre hay mal olor. La estatua de Joe debió estar en un lugar más llamativo y significativo', afirmó Donaldo Velaides, un cartagenero amante de la música de Joe, y quien es vecino de su familia en el barrio El Socorro.
Por Dálida Orozco R