Alci Acosta llevó el romanticismo al Estéreo Picnic
El bolerista soledeño fue ovacionado por gran parte del público asistente al multitudinario evento que se cumplió en Bogotá. Su hijo Checo Acosta lo acompañó en tarima.
Estéreo Picnic es el festival musical más grande del país, no solo por la cantidad de espectadores que congrega, sino también por su variada nómina, que integra a grandes figuras de géneros musicales como el Rock, Funk, Pop, Música Folclórica y hasta Boleros. En este último género, uno de los invitados este año fue el soledeño Alci Acosta, toda una leyenda de la música romántica colombiana.
El padre del también cantante Checo Acosta, se presentó este sábado en la tarima Adidas del Estéreo Picnic, evento que ofreció cuatro días cargados de presentaciones electrizantes.
Hasta el Campo de Golf Picnic y Centro de eventos Briceño 18, que se encuentra en el kilómetro 19 de la vía entre Bogotá y Tunja, se trasladó el maestro Alci para interpretar lo mejor de su repertorio y seducir a un público de distintas edades durante una hora (de 5:15 p.m. a 6:15 p.m.).
El artista de 84 años, ingresó al lugar en un carro de golf, para no agitarse y también se le observó bien abrigado, luciendo una bufanda para protegerse del frío.
En el tercer día del festival, Acosta alternó con el grupo estadounidense de Rap Wu-Tang Clan, el dúo británico de música electrónica The Chemical Brothers, los argentinos Bizarrap y Trueno y el paisa Ryan Castro.
Su voz se apreció muy clara y cargada con el mismo romanticismo de siempre, por lo que el público se animó a acompañarlo con un coro constante en clásicos como Traicionera, La copa rota y La Cárcel de Sing Sing e incluso algunas parejas se animaron a bailar bien abrazados.
Acosta, para sorpresa de muchos, llenó el escenario, a la par de artistas internacionales como la española Rosalía. Hasta los más rockeros se dejaron contagiar por su voz melodiosa y romántica.
Su nieta Lauren Acosta a través de varias historias en Instagram compartió apartes de la presentación del maestro.
“El corazón se nos explota de orgullo, es que no se imaginan. Lo que acabamos de vivir nunca lo olvidaremos como familia. Abuelo, eres gigante y toda Colombia lo sabe”, manifestó Lauren.
La leyenda del bolero estuvo respaldada en tarima por el talento de su hijo Checo Acosta, quien tocó las maracas y además lo ayudó a cantar, protagonizando así uno de los momentos más emotivos del festival.
Juntos interpretaron La copa rota y No renunciaré; luego ‘El Príncipe del Carnaval’ cantó Mi querido cascarrabias, canción que le compuso a su padre, y en la que narra parte de su crianza. Checo lo abrazó mientras tocaba el piano y derramó algunas lágrimas, ganándose así una gran ovación.
Con los ojos aguados, luego de que su hijo le dedicara el tema que lo describe a la perfección, uno de los últimos exponentes vivos del bolero se despidió de Colombia mientras el público coreaba su nombre.
“Esta presentación resultó demasiado emotiva, mi música siempre ha sonado muy fuerte en el interior del país y el público de este festival lo reconfirma. Aquí cantaron los jóvenes, también los padres y los abuelos”, dijo Alci
Por su parte Checo sostuvo que “el hecho de que mi papá esté en este festival donde se presentan grandes figuras de la música mundial nos tiene contento, los homenajes se hacen en vida y por eso agradecemos este tan emotivo”.
El vocalista y pianista de 84 años, que últimamente ha presentado algunos problemas de salud, realizó su presentación sentado en una silla y sorprendió cantando con Catalina García, vocalista de la banda Monsieur Periné su súper éxito Traicionera, una combinación que fue del total agrado de los espectadores, que al final terminaron haciendo el coro: “Otra, otra, otra”, para que siguiera en escena, pero ya todo estaba cantado y Alci se marchó con una gran sonrisa.
