
¿Qué le pasa a Junior?
El equipo solo ha sumado seis puntos de 15 posibles en la Liga. Mejoró en defensa, pero sigue sin inspiración y sin contundencia.
Esta vez no hay excusas. Junior viene entrenando única y exclusivamente para la Liga. Después de la prematura eliminación de la Copa Sudamericana ante Libertad de Paraguay, no hay viajes ni compromisos internacionales. Los entrenamientos siguen siendo a puerta cerrada. Ha existido tiempo y tranquilidad de sobra (“semanas largas”) para preparar los partidos y exponer con mayor solidez una idea futbolística que ya va para un año de trabajo.
Luis Amaranto Perea asumió la dirección técnica de los ‘Tiburones’ el 17 de septiembre de 2020, en la victoria 2-1 ante Barcelona de Ecuador, en Guayaquil, en la Copa Libertadores. Exactamente en un mes completa un año como entrenador rojiblanco.
En los últimos 10 partidos del semestre pasado, exceptuando el segundo juego de la semifinal de la Liga ante Millonarios, en Bogotá, que significó la eliminación de esa competencia, el equipo se vio afianzado, con un estilo de juego claro y colectivo, que supo lidiar la ausencia de una individualidad vital en la creación como Teófilo Gutiérez, y, por momentos, la del goleador Miguel Borja.
Sin embargo, toda esa estructura que existía se ha derrumbado en este comienzo de temporada. Junior no fue el mismo de ese remate del primer semestre en la serie ante Libertad y en los cinco primeros partidos de la Liga.
Ha tenido retazos de partido en los que luce consistente y ambicioso, como en los primeros 15 minutos en el empate 0-0 ante Tolima, pero la generalidad es de un equipo que sufre poco en defensa (a excepción del 4-3 ante el cuadro paraguayo en el ‘Metro’), pero genera y concreta poco de mediocampo hacia arriba.
Justo en el partido más inspirado y certero ofensivamente, ese ante Libertad, Junior vivió un festival de errores defensivos que resignaron su participación internacional en lo que resta del año.

La inclusión de Dany Rosero y Willer Ditta a la titular (y Alfonso Simarra en un par de juegos) apretó las tuercas en zona posterior, pero la claridad creativa y la contundencia no se han visto más.
Junior ya está eliminado en la Copa Sudamericana y en la Liga, tras las cinco primeras fechas, se sigue distanciando del primer lugar de la reclasificación que da cupo a la Copa Libertadores y se encuentra fuera de los ocho mejores. Suma solo seis puntos de 15 posibles, producto de tres empates, una derrota y solo una victoria. ¿Qué le pasa al equipo?
Cinco razones del mal comienzo de Junior
Delantera sin peso
Junior extraña demasiado a Miguel Borja. El cordobés era garantía de un gol por partido y siempre estaba su amenaza latente para los rivales. Su partida dejó un hueco que difícilmente se llenará con Cristian Martínez, Carmelo Valencia y Juan Sebastián Herrera (quien no jugaría más en este semestre por lesión).
La potencia y poder anotador de Borja no se reemplaza de la noche a la mañana. Carlos Bacca era el ideal para ocupar esa vacante, pero no se pudo redondear su contratación.
Faltaron refuerzos
Junior debía reforzar su zaga con un defensa central más y ampliar las alternativas en los extremos y en la creación. Era necesario ponerles una buena competencia a Fredy Hinestroza, Edwuin Cetré , Fabián Sambueza y Luis ‘Cariaco’ González para que no se dependiera de la irregularidad de ellos, y el nivel de todos, en medio de la lucha por el puesto, creciera.
Ahí le están faltando opciones confiables a Luis Amaranto, que solo pidió a José Carlos Muñoz, reinventó a Piedrahíta y aceptó el regreso de Bocanegra.
Laterales confundidos
Laterales confundidos Los laterales de Junior, Wálmer Pacheco y Gabriel Fuentes, no tienen el mejor nivel individual en estos momentos, pero aparte de eso no han podido asimilar y sincronizar de manera acertada la idea colectiva de transitar por los llamados ‘carriles internos’ para no atropellarse y combinarse adecuadamente con los extremos.
Mientras afinan los movimientos, sobre todo cuando el rival se atrinchera, se ha perdido toda la peligrosidad que ambos suelen ofrecer con su salida normal.
Decisiones erradas
Perea ha cometido varios errores en la conformación de la titular y en las sustituciones durante los partidos. Sus decisiones a veces resultan incoherentes con lo que expresa y sucede en la cancha.
Carmelo Valencia anota gol ante Libertad, pero en el partido de vuelta, después de decir que Cristian Martínez no está para ser inicialista y que hay que llevarlo de a poco, deja en la banca a Valencia y pone a Martínez. Sambueza viene mal, pero lo pone de titular ante Jaguares por encima de ‘Cariaco’, que ha estado mejor.
Mucho conformismo
Ante Jaguares, los jugadores de Junior solo jugaron con la decisión, velocidad y agresividad que se requería en los últimos 10 minutos, después de recibir el gol en contra. Con el agua al cuello es que quieren salvar lo que dejaron hundir cuando había más tiempo.
No muestran intensidad, dinámica y concentración durante todo el partido. Caen en unos desesperantes letargos de pasividad y conformismo de los que apenas reaccionan cuando los pellizca el contrario con una anotación. La parsimonia es excesiva.