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Oleksandra Matviichuk es una abogada ucraniana de derechos humanos y preside el Centro para las Libertades Civiles en Kyiv. Cortesía
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“Tenemos que mostrar la dimensión humana de esta guerra”: Nobel de Paz 2022

Oleksandra Matviichuk, quien dirige el Centro para las Libertades Civiles de Ucrania, dialogó en exclusiva  con EL HERALDO.   

No brotan lágrimas de sus ojos cuando piensa en la guerra, pero la indignación se derrama a cántaros entre sus palabras cuando describe la perversidad de un conflicto que desangra su país en una lucha que define no como un enfrentamiento entre dos países, sino entre sistemas.

Oleksandra Matviichuk ganó el Premio Nobel de Paz en 2022 por su rol como directora del Centro Para las Libertades Civiles de Ucrania, entidad que nació en 2007 y tuvo su primera aparición en la escena cuando, en 2013, defendió los derechos de su país en el marco del Euromaidán.

Cabe mencionar que esta fue una serie de manifestaciones que tuvieron lugar en Kiev y que corresponden a un antecedente del conflicto ruso-ucraniano que acabó derrocando del poder a Víktor Yanukóvich, que ejercía como líder de la formación política prorrusa Partido de las Regiones. 

Alentada por el propósito de defender a su nación desde la solemnidad de los protocolos internacionales, Matviichuk va por el mundo transmitiendo un mensaje en favor de una Ucrania que agoniza y pide auxilio en medio de un conflicto tan incierto como desigual, según defiende.

Y es que la invasión rusa a territorio ucraniano cumplió la semana pasada su primer año, sin que todavía se vislumbre el final del camino.

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Hasta el momento, la ofensiva desplegada ha dejado cerca de 8 mil muertes de civiles a corte de febrero de este año, según la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos. Esto sin contar las muertes de soldados de lado y lado en el conflicto.

 Mientras la guerra continúa en las regiones que colindan entre el interés estratégico de ocupación rusa y la resistencia de los soldados ucranianos, la abogada de derechos humanos recorre los países visibilizando los relatos de la guerra. Así llegó a Cartagena. Su propósito: presentar una dimensión humana del conflicto desde el Hay Festival.

A continuación, apartes de la entrevista que la Nobel concedió a EL HERALDO.

Pregunta: En su discurso del premio Nobel, usted habló de una mujer cuyo esposo era agricultor y murió en medio de la guerra. ¿Qué rol cumplen los relatos dentro del conflicto?

Respuesta: En nuestro trabajo documentamos no solo las violaciones, sino el dolor humano para dar una comprensión clara de lo que sucede. No hablamos solo de violaciones al Derecho Internacional Humanitario, sino de la vida humana desde las ruinas.Es decir, violaciones, secuestros, vidas ultrajadas. En ese sentido, las historias son importantes porque solo con ellas comprendemos el dolor de la gente, independiente de las divisiones por ideologías, abuso político, religión o posiciones sociales.

Hablamos del hecho de que no hay justificación militar para tales crímenes. No hay justificación militar para atacar un hospital de maternidad. Tenemos que mostrar la dimensión humana de esta guerra.

P: La guerra tiene intereses económicos profundos. Alemania juega un papel importante y Olaf Scholz ha intervenido para que Ucrania no reciba apoyo. ¿Qué interpreta de esa posición?

Es un grave problema que países sesgados intenten pretender que son neutrales. Cuando comparamos a Rusia con un país mucho más pequeño y de menos potencial, no puede haber neutralidad en el orden internacional.

Si no estás preparándote para apoyar a Ucrania, es porque estás ayudando a Rusia. La diferencia económica, de tamaño, en la influencia y la economía, solo lleva a que Rusia tenga más ventaja y potencia. Alemania tiene conexiones económicas cercanas a Rusia y sabemos que ellos usaron su gas para desarrollar su economía, pero esta no es una guerra entre dos estados, sino entre dos sistemas, entre democracia y autoritarismo.

Es para mí una posición bastante extraña, porque cuando esta guerra empezó, encontré que no puedo apoyarme con ningún mecanismo de defensa, porque Rusia ignora las leyes internacionales y las decisiones de las instituciones internacionales que han sido instauradas para la justicia.

Han demandado a Rusia salir de Ucrania, entonces cuando me preguntan cómo ayudar a las personas a sobrevivir, he tenido que pedir que por favor provean armas a Ucrania para poder ganar, y es muy raro escuchar esto de parte de una abogada de derechos humanos, pero es que la ley no ha funcionado, y la gente está siendo asesinada por los rusos y es hora de detenerlos.

las historias son importantes porque solo con ellas comprendemos el dolor de la gente

P: ¿Eso quiere decir que no existen garantías internacionales para un país como Ucrania en medio de la guerra? 

R: Vivimos en un mundo donde el sistema internacional de paz y seguridad no funciona. Todo el sistema de la ONU no pudo detener la atrocidad rusa.

Este mundo es muy peligroso para vivir y no solo para los ucranianos, sino para todas las naciones. Ucrania es el mejor ejemplo de que tus garantías de derechos humanos y tu seguridad no dependen del orden internacional, sino del hecho de que vivas o no en un país con un fuerte potencial militar o armas nucleares.

Debemos solucionar este problema y restaurar el orden internacional no solo para los ucranianos, sino para que todo el mundo detenga este peligroso pensamiento ilógico.

P: Hace algunas semanas, el presidente Gustavo Petro expresó su opinión sobre esta guerra. ¿Beneficia a Ucrania la posición adoptada por Colombia?

R: El presidente Gustavo Petro dijo que no ejecutará acciones para apoyar la guerra en Ucrania ni aportará con insumos bélicos o armas porque quiere que la guerra acabe.

Pero si no apoyan a Ucrania, Rusia ganará y la guerra acabará, esa no es la solución a la situación, porque no hay “paz” cuando un país que ha estado soportando deja de luchar. Eso no es paz sino ocupación. Eso no es neutralidad, sino indiferencia.

No podemos ser indiferentes al dolor humano, y los políticos responsables no pueden ignorar las violaciones al orden internacional que están sucediendo en este preciso momento en diferentes partes de Ucrania. Ya hemos pasado un año así.

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