Mujer E Igualdad | EL HERALDO

El Heraldo
Ha estado a bordo en los ARC Gloria, 20 de Julio y Valle del Cauca, cumpliendo sus misiones. Archivo particular
Mujer e Igualdad

Karen Mancera, una teniente ‘influencer’ por tierra, mar y aire

La militar busca romper estereotipos y demostrar que las mujeres son capaces de asumir grandes retos. En redes muestra su día a día.

En las profundidades, en la superficie y en la alturas. Buceando, haciendo paracaidismo, navegando en los buques o nadando con tiburones. Cada día los seguidores de Karen Mancera, Teniente de Fragata de la Armada Nacional (ARC), esperan ansiosos para ver cuál será la aventura del día.

Se ha vuelto viral en las redes sociales por su admirable labor cumpliendo misiones para defender al país por mar o tierra.

Documenta largas navegaciones, el rescate de animales, ayudas a personas, viajes en submarinos o helicópteros, entrenamientos y recorridos por los buques. Y no es solo eso. También comparte videos “tutoriales” de cómo peinarse, cómo porta su uniforme y hasta cómo se emplea la jerga militar. Algo novedoso para muchos.

En Instagram se encuentra como @latenientebaq y su cuenta alcanza más de 42 mil seguidores. A través de contenido interactivo, la teniente influencer, y tal vez la primera, también explica a los usuarios cómo funciona la carrera, qué se hace cuando se gradúan en cada rango, cuánto tiempo dura la formación militar, y cuáles pueden ser los pros y contras.

Todo inició en 2019, cuando espontáneamente grababa en unidades operativas mientras navegaba. Eso lo subía a sus redes. Cuando la Fuerza notó el éxito que estaba teniendo dicho contenido le otorgaron la responsabilidad de hacer parte del Distrito de Incorporación. Recibió la debida capacitación para llevar el mensaje y así ha convertido el perfil en un canal más por el cual los interesados se informan también sobre el proceso para pertenecer a la Institución Naval.

Por los aires Mancera también ha mostrado sus experiencias a los seguidores.
“Primero humana, luego militar”

Mancera nació en Barranquilla en medio de una familia tradicional. Como cualquier estudiante tuvo varias carreras en mente. En alguna etapa se había inclinado hacia la danza, el arte y el modelaje. Pero aplicó a la Armada dos meses antes de graduarse del colegio. Fue la única que pasó los filtros de todos los que hicieron el proceso. El resto es historia.

Entró a los 16 años a la institución. Estudió cuatro años en la Escuela Naval de Cadetes Almirante Padilla, en la ciudad de Cartagena. Se graduó a los 20. Desde ese momento ha consolidado su carrera pasando por varias unidades operativas de la Fuerza. Estuvo dos años en la ARC del Valle del Cauca, dos años de Guardacostas, y año y medio en la Capitanía de Puerto.

Como Comandante del Distrito de Incorporación de Barranquilla con responsabilidad de Santa Marta, Valledupar y La Guajira, su misión es ser otra vitrina para la institución.

En 2013, durante su proceso de formación militar, navegó durante varios meses a bordo del ARC Gloria en una larga, pero sustanciosa expedición. Pasó por países como Malasia, Tailandia, Hong Kong y Singapur. Entre 2014 y 2015, con el ARC Valle del Cauca realizó operaciones contra el narcotráfico, rescate de personas en el mar, protección del Santuario Malpelo, y el Parque Natural Gorgona. En 2019 con el ARC 20 de Julio, participó en el desarrollo de operaciones de soberanía en el archipiélago de San Andrés.

Como estas y otras expediciones, reconoce que 40 días o más navegando en un buque puede ser “aburrido” para algunos, pero ella decidió agregarle un toque más entretenido a estos espacios laborales. Así salía un poco de la rutina y se conectaba con el exterior, mostrando lugares recónditos y pocos turísticos, que sin duda llamaron la atención de los cibernautas que rápidamente se enamoraron de su contenido.

Según relata la teniente, una “universidad convencional” no ofrece las experiencias que ella ha podido vivir en su paso por esta Fuerza. Ser militar le ha dado la posibilidad de hacer todos los cursos que tiene la institución, ofrecidos para que el personal pueda desarrollarse y capacitarse en todas las habilidades.

“La experiencia dentro de la institución me dice que no se debe creer en lo que a veces se supone de nosotras las mujeres. Debemos estar seguras de lo que somos capaces de hacer, lo vemos mucho en estas instituciones y está comprobado que podemos hacer las cosas mejor de lo que se espera”, cuenta.

Con entusiasmo Karen dice que aunque los militares tienen una rutina, también deben estar atentos a la orden del día. Ella es muy versátil dependiendo de la misión.

Actualmente es Teniente de Fragata, y en diciembre ascenderá a Teniente de Navío.

Se considera apasionada por su trabajo.
Inmersa en la red

Mancera confiesa que no es tarea fácil mantener conectados a sus seguidores, pero para ella es primordial transmitir las mejores vibras para atrapar al público. “Así haya tenido un mal día siempre estaré con la mejor actitud”.

Como parte de su carrera militar, la influencer también hizo una especialización en marketing en una universidad. Estos conocimientos le permitieron construir esa imagen por la que hoy es conocida en sus redes. “Yo muestro a la Armada de forma experiencial mostrando a qué me enfrento a diario y lo que hago. Ya en últimas si alguien está interesado en entrar, yo lo puedo orientar”.

No ha lidiado mucho con los famosos haters, pero son personas a las que prefiere no darle importancia.

Reconoce que estar en las plataformas digitales la expone en cierta manera, sin embargo, ha sabido trazar la línea entre lo personal y lo público. Pocas cosas de su vida privada deja saber. En sus días de descanso intenta documentar alguna de sus actividades cuando no está portando el uniforme. También se cohíbe de hablar de temas relacionados con política, sexo o religión.

A Mancera le gusta hacer buceo.
En su memoria y su corazón

Con nostalgia narra cuando antes de abordar en el ARC Gloria en 2013, recibió la noticia que ningún hijo espera recibir. Su padre había fallecido. “Yo le decía a mi mamá que me bajara del buque, que yo no podía ni quería ir y además iba para el otro lado del mundo”. El doloroso momento lo vivió estando en su etapa de formación. Con el tiempo fue asimilándolo e intentó disfrutar de aquella larga navegación. Las cartas a mano que su padre le mandaba se convirtieron en su refugio y en su mayor motivación para terminar la carrera, aunque él no haya estado ahí para verla graduarse.

Su madre, Betty, ha sido su polo a tierra siempre para ella y su hermano. Gracias a su incansable esfuerzo y su incondicional apoyo, Karen se ha convertido en una mujer de admirar en todos los aspectos de su vida. Un sueño cumplido para las dos.

“Si uno se deja llevar por las emociones, toma malas decisiones”, señala la teniente en cuanto a la parte sentimental que implica permanecer lejos de su familia.

Las personas interesadas en informarse y ser orientadas por Mancera pueden contactarse con ella a través de su perfil en Instagram.

Su compañía: La perrita marinera

Sin rumbo fijo permanecía en parqueaderos buscando qué comer. Karen la rescató de las calles y la nombró Mecánica. Ella es la perrita marinera de la Armada. Acompaña al equipo a cumplir algunas misiones y está entrenada. La amiguita de cuatro patas se ha robado el corazón de los militares.

Facebook
Twitter
Messenger
Whatsapp
Convierta a El Heraldo en su fuente de noticias
X
COMO REPORTAR A WASAPEA
1. Agrega a tu celular el número de Wasapea a EL HERALDO: +57 310 438 3838
2. Envía tus reportes, denuncias y opiniones a través de textos, fotografías y videos. Recuerda grabar y fotografiar los hechos horizontalmente.
3. EL HERALDO se encargará de hacer seguimiento a la información para luego publicarla en nuestros sitio web.
4. Recuerda que puedes enviarnos un video selfie relatándonos la situación.