En el aula las clases se entienden mejor: alumnos de Unimagdalena
Se mostraron felices por haber retornado a la presencialidad académica.
Felices se mostraron los estudiantes de la Universidad del Magdalena tras el retorno a las clases presenciales. El viernes fue un día cargado de emociones para los alumnos. Por un lado aquellos que después de un año y medio se reencontraron en el Campus y por otro, los que se conocieron físicamente luego de tres semestres en virtualidad académica. La mayoría de estos últimos tampoco habían pisado la alma mater.
Yuleima Bocanegra García, oriunda del corregimiento de Carreto, municipio de El Piñón y estudiante de tercer semestre de Ingeniería Agronómica, recibió por primera vez clases en el aula, sentada en un pupitre y cara a cara con su maestro.
"Es la primera vez que vengo a la Universidad, no conocía a nadie... era necesario", dijo Aldo Enrique Charris Hernández, estudiante de cuarto semestre de Ingeniería Pesquera, manifestó que "aquí el ambiente es muy distinto al de estar en la casa, siempre sentado frente a un computador con monotonía, aquí es muy distinto es otro ambiente", anotó.
Yuleima y Aldo forman parte de ese 56 por ciento de estudiantes que respondió "sí", al retorno a la presencialidad, a través de la encuesta que la Alma Mater aplicó a toda su comunidad estudiantil y que fue respondida por 10.527 de sus alumnos.
"Los estudiantes que están en la casa no saben de lo que se están perdiendo, la verdad que acá, todo es muy diferente, incluso en las clases se entiende un poco mejor", manifestaron.
Para el licenciado magister Jorge Luis Lara Orozco, quien orienta Cálculo Integral en la Facultad de Ingeniería, la experiencia de retornar "era necesaria".
Asegura que la actividad académica ahora será más enriquecedora "porque desarrollará un modelo híbrido de educación, con unos estudiantes en el salón de clases y otros aprendiendo desde la conectividad, en sus casas o sitios de trabajo".
“Es una experiencia bastante emocionante, porque ya uno viene desde hace rato dando las clases hablando frente a una pantalla y de repente, te reencuentras con que ya tienes estudiantes en el salón, que ya comparten, que ya hablas, que interactúas tanto con los que están aquí como con los que están en línea", comentó.
Por su parte el licenciado magister Roberto Carlos Torres Peña, profesor de Cálculo Diferencial del Programa Ingeniería de Sistemas, afirmó que "volver es una gran oportunidad para aprender mejor, porque existen materias como las que dicto que requieren alto grado de concentración, pero también, porque era necesario devolverle un poco más de humanización a las clases".
“Los estudiantes en la virtualidad habían demostrado no estar cómodos. Uno, por el nivel de desconcentración que ofrecen los hogares, las interrupciones que encuentran. Cálculo es una asignatura de mucha concentración, que requiere estar atento siempre. Creo que es una gran oportunidad ver a los estudiantes aquí en el aula de clases. Por ejemplo, los que han llegado en estos días han manifestado que se concentra más, que comprenden más, que tienen más oportunidades de participar y de interactuar con el profesor, incluso interactuar con los conceptos. Interactuar con los estudiantes, eso le da un poquito de humanidad a las clases y tatambién hacía falta”.
Los profesores que debieron aprender una nueva forma de transmitir conocimiento desde el hogar y a través de un mundo del que no son nativos. Y sufrir todas las primiparadas del micrófono apagado o encendido mientras hablaban con algún familiar, la cámara encendida que pudo haber mostrado cualquier intimidad, o todas las bromas que sufrieron, por parte de unos alumnos que lo veían en silencio, mientras él solo observaba su pantalla con recuadros negros.
