Juan Manuel Gómez, un bogotano que desde hace 25 años vive fuera del país, se enteró a través de un amigo de la rehabilitación de los 3.500 metros cuadrados del edificio Ruiz Quijano, un ejemplar de la arquitectura Art Deco de Barranquilla, ubicado en la calle 43 con carrera 45 esquina del Centro Histórico.
Gómez fue uno de los primeros en adquirir un apartamento en la edificación patrimonial que hoy lleva por nombre ‘El Legado’ y que será inaugurada el próximo 20 de diciembre. 'Conocí de este proyecto en una ciudad que tiene una visión y un gran desarrollo como lo es Barranquilla. Es una edificación con un gran valor histórico y decidí que era una buena oportunidad para invertir aquí', dice Gómez al señalar que, algunos amigos y familiares, lo tildaron de 'loco' por su decisión.
Y es que el Plan de Desarrollo de la administración del alcalde Alejandro Char plantea la ejecución de varios proyectos para convertir el Centro en una zona residencial, coexistiendo con otros usos como el comercial.
El edificio Ruiz Quijano se convirtió en un 'ícono del movimiento Art-Deco' y 'en una huella de las influencias culturales que entraron por la Puerta de Oro de Colombia y que hicieron de Barranquilla una ciudad polifacética', expresa Alejandro Riascos Escolar, gerente de Retro proyectos, firma que busca mantener la memoria histórica de la arquitectura y la vida cotidiana de la época.
Una necesidad
El arquitecto, especializado en patrimonio, urbanismo y gestión de proyectos, exdirector de la Unidad de Patrimonio de la Secretaría de Cultura, Patrimonio y Turismo de la Alcaldía de Barranquilla, detalla que la recuperación de este edificio surge de una perspectiva y un mercado existente en el Centro, zona que maneja una población flotante que vive en las periferias de la ciudad y trabaja en instituciones públicas y privadas.
'Todos los días viene gente de todas parte de la ciudad y del Atlántico a trabajar acá y gastan hasta dos horas al día transportándose y por ello quieren vivir más cerca de su trabajo', dice Riascos. A partir de esa necesidad empezaron a buscar un edificio representativo y con unas características que se ajustaran a lo que ellos querían y fue así como encontraron este, cercano a la Gobernación, la Cámara de Comercio, el mercado y entidades bancarias, entre otras. Se estima que a este sector barranquillero llegan, en promedio, una población flotante de casi 150.000 personas diarias, en la que confluyen barranquilleros, habitantes de los municipios atlanticenses y otros departamentos de la Región Caribe.
Restauración
La dirección creativa del proyecto está a cargo de la diseñadora Jessica Janna Saleh, quien explica que les tocó estudiar e investigar cada uno de los detalles de la vieja edificación como pintura, pisos, vigas, techo y paredes, entre otros.
'Cada apartamento tiene su esencia, su historia y con la recuperación le estamos haciendo honor a esa esencia, no tratando de construir una nueva estructura, sino conservar algo que una vez fue glorioso y que sirvió para vivienda', dice Janna al indicar que a través de la parte creativa se encargaron de conservar los pisos, de escoger los tonos de la pintura de la parte exterior e interior.
El edificio cuenta con sótano, 8 pisos, 34 apartamentos, 3 locales, 8 parqueaderos, una zona común de lavandería. Redes nuevas de acueducto, sanitarias, de gas, redes eléctricas. Proyecto que genera las condiciones de una vivienda nueva, dentro de una estructura antigua y respetando los elementos representativos del edificio como las modulaciones de ventanas, pisos, zócalos.
Además tiene elementos contemporáneos, teniendo en cuenta que las luces se automatizaron con sensores de movimientos, los ascensores son digitales e instalaron paneles solares para la iluminación de la fachada. Todos los apartamentos fueron vendidos en 9 días.
De acuerdo con los beneficios que otorga el Distrito, quienes ya compraron apartamentos en este edificio patrimonial cuentan con un '90% de descuento en el Impuesto Predial y 90% en Valorización y todos los servicios los cobran por debajo de estrato 3, beneficio que tiene el Centro Histórico para proyectos de viviendas', indica Riascos.
Lo que dice el plan
Margarita Zaher, secretaria de Planeación del Distrito de Barranquilla, aplaude que inversionistas privados estén mirando el Centro para desarrollar este tipo de proyectos. Sostiene que la recuperación del espacio público y el programa de peatonalización son acciones que adelanta el Distrito para volver esta zona residencial.
La funcionaria destaca que en el Centro hay una amplia cobertura de servicios públicos, pues casi el 90% del sector cuenta con estos; no obstante, debido a la baja actividad residencial, solo el 33% de su capacidad es utilizada.
Zaher explica que el Plan Especial de Protección –PEP– del Centro, elaborado en 2005, arrojó que los predios que desarrollaban la actividad comercial en los primeros pisos correspondía a un 58,26% y el 8,9% estaba desocupado; en los segundos pisos había actividad comercial o de bodegaje en un 31,39% y en los terceros niveles de esos predios el porcentaje de desocupación era del 30,28%. Estos últimos pisos son los que ofrecen un alto potencial para ocuparse en usos como el residencial.
En la actualidad, en el Centro Histórico solo alrededor del 10% del patrimonio edificado es usado en actividades residenciales a partir de la segunda planta. Apenas sectores como San Roque presentan un nivel aceptable de vivienda en planta baja.
Según lo establecido en el Plan de Desarrollo, el Centro cuenta con un potencial inmobiliario de más de 400 predios en los que pueden reactivarse planes habitacionales. El Censo del Dane de 2005 arrojó que en el Centro había 1.157 predios, 885 viviendas, 109 edificios y conjuntos (propiedad horizontal); 1.781 construcciones y 13 lotes urbanizables no urbanizados (disponibles para desarrollar).
Sobre el potencial de esta área de la ciudad, la reconocida arquitecta restauradora Katia González plantea que para que el Centro sea atractivo, el Distrito debe comprar una manzana y hacer un proyecto modelo en el que recuperen edificios patrimonios y otros que no lo sean para desarrollar allí programas de vivienda de interés social.
'Con esa cuadra o manzana modelo la gente empezará a volver al corazón del Centro', opina González, quien destaca que lo que está pasando con ‘El Legado’ es 'un ejemplo'.
Peatonalización
Dentro del propósito de rescatar el Centro, la Alcaldía adelanta el programa de peatonalización que en su primera etapa escogió seis calles: carrera 41 entre calles 30 y 32; calle 31 entre carreras 41 y 42; calle 33 entre carreras 40 y 41; calle 33 entre carreras 42 y 43; carrera 41B entre calles 30 y 31 y carrera 42 entre calles 30 y 31.
En estas áreas había 600 vendedores en el espacio público y con la inversión serán organizados en nuevos módulos que instalará la administración distrital en la mitad de la vía peatonal, lo que quiere decir que los andenes y parte de la calle quedarán libres para que los ciudadanos transiten sin obstáculos.
Según el Distrito, las vías peatonalizadas contarán con redes subterráneas de servicio público, también tendrán alcantarillado pluvial para que cuando llueva no se formen arroyos, iluminación LED para mejorar la seguridad en las noches y así los ciudadanos puedan disfrutar estas zonas en los horarios nocturnos, además arborización para que los peatones caminen y disfruten el paisajismo.
'La idea es dinamizar el sector a través de la formalización de muchos vendedores estacionarios, la recuperación de la movilidad y la restauración de la seguridad', afirma el gerente de Desarrollo de Ciudad, Jaime Pumarejo.