
Más de 15 mil habitantes en Manaure sin servicio de gas e internet
Esto se debe a que las autoridades tradicionales cerraron una válvula reguladora de gas para presionar a la población con el pago del servicio.
Diez días sin servicio de gas natural, y otro tanto con un irregular servicio de internet, completaron este miércoles cerca de 15.000 habitantes del municipio de Manaure en el departamento de La Guajira.
La situación surgió luego de una protesta por parte de la comunidad indígena Wayuu donde reclaman una reparación a la empresa transportadora de combustible por la muerte de por lo menos cinco personas.
El problema se origina en que, ante el fracaso de un arreglo directo, reclamado muchas veces por los líderes de las comunidades locales, las autoridades tradicionales decidieron tomarse una válvula que regula el paso del gas a ese municipio desde la mañana del pasado 23 de enero y suspender el servicio a los usuarios.
En la mañana de este 1 de febrero un grupo de usuarios del servicio de energía, encabezado por el vocal de control Nill Montiel, se apostaron frente a la alcaldía, reclamando audiencia con el alcalde José Meza para exhortarlo a que como autoridad civil y administrativa del territorio, procediera a ordenar el restablecimiento del servicio a las instancias competentes.
El servicio de gas es completamente nulo en Manaure, mientras que el servicio de internet se está prestando de manera irregular en esa localidad donde inicia La Alta Guajira, debido a que también reclamando pago de servidumbre por el paso de las redes en su territorio, una comunidad aborigen al parecer en una manipulación de los cables generaron problemas que ahora hacen que la señal de la fibra optima no llegue en las mejores condiciones.
Esta problemática no solo afecta a los usuarios de internet del municipio de Manaure, sino que también genera dificultad en la conexión que deben hacer los usuarios de todo el municipio de Uribia, donde no menos de 5.000 personas usan este servicio de comunicación.
Según el vocal de control, la problemática se remonta a años atrás cuando una comunidad recibió pago por el paso de la tubería en sus territorios y otros clanes reclamaron el derecho a ser tenidos en cuenta y eso los enfrentó al puno de que según el relato, cinco personas fueron asesinadas en las confrontaciones.
En la ley del wayuu, el que genera la problemática, aunque no se lo haya propuesto, debe pagar al ser considerado falta según el sistema normativo propio.
En vista de esto es que ahora un grupo de autoridades han reclamado la reparación por aquellas muertes y aunque no logran una presentación oficial de las aspiraciones, trascendió que esa cifra estaría en el orden de $700 millones, de lo cual sostienen que es completamente negociable a la hora que se sienten las partes involucradas.