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Belkis Yaneth Rojas Cabarcas, de 26 años, es la sexta mujer asesinada en los primeros 52 días del año. Su muerte se produjo por un disparo en la cabeza entre 4 y 5 de la madrugada de ayer, en el apartamento 101 de la torre 10 del conjunto residencial Parque 100, en el barrio Miramar, norte de Barranquilla.

El presunto homicida es su pareja Diego Armando Muñetón Padrón, de 29 años, quien tiene anotaciones penales. El coronel José González informó que agentes de la Sijín y patrulleros de la Policía fueron informados del hecho por su padre, el abogado Diego Muñetón Vega.

'Los vecinos escucharon una discusión la noche del martes, pero dicen que no escucharon alguna detonación', agregó González, comandante operativo de la Policía Metropolitana.

Las pesquisas señalan que el crimen de Rojas, la sexta mujer asesinada este año (ver recuadro), tuvo como preámbulo una discusión con su compañero. Al entrar en uno de los cuartos, los policías encontraron el cuerpo de la mujer, con un impacto en el ojo izquierdo, y cerca a la hija de la pareja de cuatro meses.

De inmediato, policías de Infancia y Adolescencia trasladaron a la infante al hospital Niño Jesús, donde permanece fuera de peligro.

Algunos residentes del conjunto residencial Parque 100, asomados desde los balcones de varios apartamentos, observaron con sorpresa cuando peritos del CTI sacaron el cuerpo de la torre 10.

SE ENTREGÓ.

El abogado penalista Diego Muñetón Vega cumplió en horas de la tarde con su anuncio a las autoridades de la entrega de su hijo. Vestido de jeans azul oscuro y una camisa manga larga del mismo color, Muñetón Padrón entró hacia las 4:20 de la tarde a la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de la Fiscalía, acompañado de un abogado e investigadores de la Policía y la Fiscalía.

No fue la primera vez que Muñetón ingresó a la URI en calidad de indiciado. Ya el 23 de marzo de 2011, cuando tenía 26 años, fue capturado junto con Guido Suárez Bohórquez y Leidys Restrepo Londoño por el delito de hurto calificado y agravado.

A las 5 p.m. de ese día, agentes de la Seccional de Inteligencia de la Policía (Sipol) los sorprendieron en la calle 80, entre carreras 50 y 51, cuando atracaban a a una familia.

Según expuso la Fiscalía en audiencia, los investigadores presenciaron cuando un delincuente encañonaba a los ocupantes de un auto y les quitaba varias pertenencias.

Uno de los policías dio reversa al auto en que iban, al tiempo que el ladrón era recogido por un motociclista. Al seguir a la pareja de sospechosos, observaron cuando el parrillero se bajó, caminó varios metros y subió a un Mazda 626 Millenim, de placas BLO-361

Alertadas por radio, unos patrulleros interceptaron al auto en la calle 90 con carrera 46. Y al requisar a sus ocupantes, los uniformados hallaron una pistola Jerichó con tres proveedores, siete celulares, una cadena de oro, las llaves de otro auto y dinero.

El arma tenía salvoconducto a nombre de Muñetón Padrón y las víctimas la reconocieron como la usada para intimidarlas, pero en audiencia la Fiscalía solo pidió a un juez que enviara a cárceles a Bohórquez y Restrepo. Meses después, el ente acusador precluyó la investigación contra el primero.

En junio de ese año, la Policía exhibió un cartel con las fotos de 33 miembros de una red criminal de los Rastrojos en el área metropolitana de Barranquilla. Entre esas la de Muñetón, quien nunca fue detenido pese a la orden de captura en su contra por concierto para delinquir con fines de homicidio, extorsión y tráfico de estupefacientes.

El requerimiento tampoco está vigentes porque la Fiscalía no pidió su renovación ante un jueces penal municipal con función de control de garantías.