Mientras el riesgo persiste, las comunidades siguen esperando la solución estructural que les devuelva tranquilidad y, sobre todo, dignidad luego de su tragedia.
La final de la Copa Sudamericana en 2026 es una oportunidad única para que la ciudad se inserte en la senda del turismo internacional de los grandes eventos.
La cumbre de las altas cortes en Barranquilla reivindica la independencia judicial ante el acoso de quienes buscan desacreditarlas para enlodar sus decisiones.
Esta acreditación refuerza la reputación de este destino ante visitantes de índole nacional e internacional, lo que permitirá dinamizar la economía local.