El Citi Field estalló en júbilo cuando Francisco Lindor conectó un grand slam decisivo en la sexta entrada para guiar a los Mets de Nueva York a una victoria 4-1 sobre los Filis de Filadelfia, asegurando así su pase a la Serie de Campeonato de la Liga Nacional (NLCS).
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Gran parte del éxito de los Mets en el cuarto juego de la Serie Divisional tuvo su raíz en la dominante actuación monticular del colombiano José Quintana.
Quintana, quien ha sido pieza clave en la rotación de los Mets en la segunda mitad de la temporada, mantuvo a raya a los Filis durante cinco entradas, permitiendo solo una carrera y dos imparables.
Su control y aplomo en el montículo le permitieron evitar el daño en momentos críticos, manteniendo a los Metropolitanos en el juego hasta que el bateo oportuno de Lindor hizo el resto. Quintana dominó con su curva y cambios de velocidad, dejando sin respuestas a los bates de Filadelfia.
En la sexta entrada, con los Mets perdiendo 1-0 y después de haber dejado las bases llenas en dos ocasiones previas, Lindor se paró en el plato en un momento de máxima presión. Con las bases llenas nuevamente y un out, los Filis recurrieron a su cerrador, Carlos Estévez, quien enfrentó al peligroso campocorto puertorriqueño. Lindor, cazando una recta a 99 mph, la conectó con fuerza sobre la barda del jardín derecho-central, provocando la euforia de los 44,103 aficionados presentes.
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Este fue el segundo grand slam en la carrera de Lindor en postemporada, sumándose al que conectó en la Serie Divisional de 1999, convirtiéndose en el único jugador de los Mets en lograr esta hazaña dos veces en playoffs. Pero también fue clave en el encuentro el trabajo de Quintana, quien estableció la pauta desde el principio.
Con esta victoria, los Mets sellan su pase a la NLCS, donde enfrentarán a los Padres de San Diego o a los Dodgers de Los Ángeles, y José Quintana sigue consolidándose como uno de los brazos más confiables de Nueva York en su carrera hacia el título.
El colombiano, que ha sido parte integral del equipo desde su regreso tras una lesión, demuestra una vez más por qué es una de las principales figuras del pitcheo latinoamericano en la MLB.
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Con un bullpen liderado por Reed Garrett, David Peterson y el implacable Edwin Díaz, los Mets aseguraron que la ventaja se mantuviera intacta tras la explosión ofensiva de Lindor, y ahora esperan con ansias el inicio de la Serie de Campeonato, a partir de este domingo.