Todavía agitada, llorando de alegría y emoción, Mariana Pajón habló de su nueva hazaña. La colombiana, que repitió en Río de Janeiro la medalla de oro que consiguió en Londres-2012, brillaba de felicidad minutos después de llevarse la victoria con sobrados méritos en la pista de la ciudad carioca.
'Es hermoso, trabajé muy duro y aquí estamos. Me sentí muy bien, como en casa. Muy tranquila desde el principio, tenía todo bajo control', dijo Mariana.
La bicicrosista paisa se impuso con una seguridad y decisión que la hicieron invencible. Ganó totalmente la competencia.
'Yo había visualizado eso, yo quería subirme en lo más alto', dijo Pajón, que de paso mostró a las cámaras su más reciente tatuaje, un ala que cruzaba su lado derecho del torso.
'Venga y lo muestro rápido antes que mi papá lo vea, que no se lo he mostrado. Perdón, papi (risas). Esas son las alas que me hacen volar alto'.
-¿La regañarán?- Le preguntó el periodista del Canal Caracol, Ricardo Urrego.
-Ahora no, porque gané oro, pero en una semana me llama aparte y me regaña.
La antioqueña aseguró que no se conformará con ser la única colombiana en conquistar dos preseas doradas en unos Juegos Olímpicos y anunció: 'Voy a seguir haciendo historia, quiero más'.