En Valledupar inició la construcción del primer Sena étnico de Colombia, que impulsará procesos de formación con enfoque diferencial, beneficiando a más de 64.000 indígenas de las etnias arhuaca, wiwa, kogui, kankuamo, yukpa, chimila y wayuu, con asentamientos en el departamento del Cesar.
La obra se ejecuta con una inversión de $4.500 millones, y se convierte en la prueba piloto de las cuatro que serán construidas en el país.
'Con este gran proyecto buscamos desde el inicio promover y proteger las culturas indígenas, pero además potenciarlas dándoles las herramientas para ampliar su conocimiento y posibilidades. Estamos convencidos que esta puesta en marcha de construcción, se verá reflejada en unos años y generará comunidades indígenas más preparadas, con mayor desarrollo en sus resguardos y territorios ancestrales', señaló el ministro del Interior, Daniel Palacios.