El gobernador de Bolívar, Juan Carlos Gossaín, calificó como un acto de barbarie la muerte de un toro, a cuchillazos y golpes, por parte de los asistentes a una corraleja en Turbaco.
'Lo ocurrido en la corraleja de Turbaco avergüenza a la gente buena de este Municipio y a todo el Departamento', dijo Gossaín en su cuenta de Twitter el sábado.
Y añadió: 'Las tradiciones de nuestros municipios no pueden desencadenar en perturbar el orden público y asociar a sus habitantes con bárbaros primitivos'.
Este domingo en diálogo con RCN La Radio, el mandatario sostuvo que 'lo que ocurrió no es una situación normal, esto se salió de control'.
Gossaín dijo las autoridades deben controlar los ataques contra animales. 'Este tipo de comportamientos hacen un enorme daño', sostuvo visiblemente molesto.
'Esta situación pudo desencadenar una tragedia que pudo comprometer vidas humanas', manifestó.
Gossaín indicó que 'más allá del debate entre defensores de la fiesta brava y protectores de animales, una turba acuchillando y pateando a un animal es demencial'.
