
“El número de contagios seguirá aumentando”: alcalde Jaime Pumarejo
En entrevista con EL HERALDO el alcalde de Barranquilla habló sobre la expansión de la COVID-19 en la ciudad. Explicó cuál es la actual tasa de letalidad, qué se está haciendo para frenar los contagios y qué es lo que más le preocupa en este momento.
El alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo, habló con EL HERALDO sobre la hoja de ruta para la capital del Atlántico frente a la nueva fase de reactivación productiva que anunció el presidente Iván Duque para el próximo primero de junio.
La indisciplina social frente a las medidas de aislamiento preventivo y distanciamiento social es lo que más preocupa al mandatario que cuenta la manera en la que se ha fortalecido el sistema de salud y las Unidades de Cuidados Intensivos en la ciudad en una carrera para ganarle tiempo a la propagación del coronavirus.
Amortiguar el impacto en la economía, dinamizar la reactivación empresarial y garantizar la asistencia social, serán los ejes de la administración Pumarejo para reducir los efectos de la crisis desatada por la COVID-19.
¿En qué momento se encuentra hoy Barranquilla frente a la pandemia de coronavirus?
En estos momentos Barranquilla se encuentra, según los criterios del Ministerio de Salud en la fase de mitigación. Es decir, en esta fase ya existe circulación del virus a nivel local por lo tanto aumentamos los esfuerzos, más cercos epidemiológicos, pruebas y apoyo a las familias con positivos vulnerables en el proceso de aislamiento y control. Actualmente, en Barranquilla hay 1.450 casos confirmados de los cuales el 82,9% se encuentra en aislamiento en casa, el 5,72% en hospitalización, el 1,52% en UCI y el 9,86% recuperado, es decir, que la ciudad cuenta con un total de 1.264 casos activos. De los 1.450 casos confirmados, el 83,3% no se encuentra en el grupo de edad vulnerable (mayores a 60 años). A diferencia de lo esperado con este nivel de casos confirmados, la letalidad y la tasa de fallecidos por cada 100 mil habitantes se encuentra por debajo del promedio nacional. Además, resulta importante destacar que el número de fallecidos por causa natural en la ciudad se encuentra hoy por debajo del promedio de los últimos años, mostrando el cuidado que han tenido las personas en esta época de cuarentena.
El crecimiento de los contagios en la ciudad y en su área metropolitana, ¿está dentro de las proyecciones previstas por el Distrito y el Ministerio de Salud?
Los ejercicios de proyección han brindado información valiosa para la preparación del sistema de salud local. El crecimiento de contagios y particularmente el número de fallecidos ha sido inferior a los modelos del nivel nacional (INS). Para respaldar esto, los ciudadanos pueden revisar los modelos municipales del Instituto Nacional de Salud y verificar que la ciudad ha logrado un menor número de fallecidos que los proyectados, este es un gran logro local y del AMB.
¿Cuándo estima que se va a producir el pico de la curva en la ciudad y cuántos casos se podrían contabilizar por día en ese momento?
Barranquilla tiene uno de los mejores promedios en Colombia, y el país, uno de los menores tiempos a nivel mundial. En Italia, España y Francia el pico llegó muy rápido, es decir, entre 29 y 33 días después del primer caso. Nosotros hemos logrado llevar el pico a casi 60 días, y si seguimos con las políticas establecidas, esperamos que llegue entre los meses de junio y julio, de manera más moderada, porque hemos logrado hacerlo poco a poco. Esto significa que hemos comprado más tiempo para prepararnos mejor, en comparación con países a los que les impactó más.
¿Está incrementándose la letalidad de los pacientes con COVID-19 en Barranquilla?
Barranquilla es una de las ciudades que más pruebas hace en el país. Aquí estamos saliendo a buscar contagiados que no presentan síntomas. De esta manera evitamos detectar contagiados, cuando ya están enfermos o con un alto riesgo de morir. Hay que entender que el número de contagios seguirá aumentando, hasta llegar a afectar a un número considerable de la población. Las estimaciones iniciales del INS hablaban de 4 millones de colombianos contagiados durante los 28/24 meses siguientes a la llegada del virus, y aproximadamente 200.000 a 300.000 en Barranquilla. Hay que recordar que más del 85% por ciento de los contagiados no se enferman ni tienen complicaciones, y que la tasa de letalidad del virus es, en Colombia, por ahora, mucho menor que en otros países. Lo importante es que el contagio sea de manera gradual, lentamente, para que la atención médica no colapse. Actualmente, la tasa de letalidad en Barranquilla es del 2,97%, cifra que se encuentra por debajo del nivel nacional (3,43%) y por debajo de ciudades como Cali (4,7%), ciudades vecinas de Cartagena de Indias (4,6%) y Santa Marta (7,3%), y muy similar a los niveles que presenta Bogotá D.C. (2,86%).
¿Cómo va la preparación del sistema de salud para el momento más crítico de la pandemia en la ciudad?
Barranquilla tiene el mayor número de camas ucis por habitante. No obstante, estamos incrementando esa capacidad en 100 camas uci por parte de la Alcaldía, y 60 por parte de la Gobernación. Al mismo tiempo, esperamos 250 respiradores adicionales del gobierno, en julio y agosto. Por otro lado, para las personas con sintomatología leve o moderada, se realizó la adecuación, dotación y operación del Hospital de Campaña en el recinto ferial del Puerta de Oro, Centro de Evento del Caribe, con el fin de aumentar el número de camas de hospitalización en 600 unidades.

¿Qué acciones especiales van a adelantar en las zonas con más contagios, por ejemplo, el suroriente de la ciudad?
Como se ha hecho desde hace meses, la Secretaría de Salud ha establecido una estrategia de priorización y focalización con acciones e intervenciones en las zonas no solo con mayor nivel actual de contagios. Tenemos un modelo para proyectar con base en las muestras tomadas, donde podrían encontrarse más positivos, pues nos interesa identificar particularmente a los asintomáticos, aquellos que al desconocer la presencia del virus pueden seguir contagiando sin querer a otras personas de su entorno familiar y laboral. Al mismo tiempo, continúa nuestra estrategia de comunicación casa a casa, a través de los 140 caminantes de la salud que hacen pedagogía y entregan tapabocas a los habitantes de las localidades Metropolitana, Suroriente y Suroccidente
¿Qué se está haciendo frente a las recomendaciones formuladas por el ministro de Salud para reforzar vigilancia epidemiológica, agilizar reporte de casos y aumentar capacidad de laboratorios?
Se ha apoyado el proceso de digitalización y geolocalización para la recolección de muestras. Desde la secretaría de Salud, se están implementando acciones de seguimiento a la prestación del servicio de salud, y al incremento en la oferta de laboratorios autorizados por el INS para toma de muestras COVID 19. Esto permite diseñar rutas óptimas que mejoran los tiempos y seguimientos a los resultados de muestras que sean positivas.
Se está evaluando el comportamiento de la ciudad durante estos 15 días para tomar una decisión de apertura de nuevos sectores económicos o de extender. ¿Qué primera percepción tiene?
Los efectos económicos aún no son plenamente identificables en la situación económica, social y empresarial del Distrito. Pero que, por el momento, se anticipa una considerable contracción de la actividad económica (formal e informal) no vista en los últimos diez años en la ciudad. La destrucción de empleo, la quiebra de empresas, la afectación al sistema local de salud, entre otras consecuencias. Es por esto que se ha adelantado una revisión exhaustiva de los posibles escenarios económicos que pueden presentarse y que han sido propuestos por distintas entidades internacionales del sector financiero, organismos multilaterales y el sector académico en las fases de desaceleración económica y recuperación. Para el caso de Barranquilla se prevé que las condiciones externas adversas que han estado presentes durante la primera mitad del año, mejoren para la segunda mitad del año. Este escenario es plausible porque, por una parte las medidas económicas y sanitarias no permitieron un pico desaforado en el número de brotes en lo que va de la crisis, y la letalidad ha mostrado una regulación importante. En segundo lugar, el Gobierno Nacional ya emprendió un proceso gradual de apertura, y a la fecha se han inscrito alrededor de 4.200 negocios que han auto declarado sus protocolos de bioseguridad, con lo cual se espera ir aumentando paulatinamente, principalmente del sector de construcción (29%), industria manufacturera (17%), comercio al por mayor y por menor (11%), talleres de vehículos (9%), actividades de reparación de equipos industriales (8%), entre las más importantes.
Si durante esta evaluación se determina que la ciudad no está lista para mayor apertura de sectores y movilización de personas, ¿qué va a pasar?
Ciertamente en el escenario considerado se estima que al menos lo que queda este año, pueden darse periodos de confinamiento y cierres preventivos necesarios para enfrentar el desafío y proteger la vida de los ciudadanos, como medidas de control de la epidemia. En especial cuando la OMS declara este virus como una enfermedad endémica, con la que vamos a tener que convivir al menos en el mediano plazo. Lo anterior implica que la oferta y el acceso a los servicios sociales van a tener que modificarse para buscar la reducción de contagios del virus, mantener el distanciamiento social y no perder los accesos y logros alcanzados en los últimos años. Es por esto que en el nuevo Plan de Desarrollo ‘Soy Barranquilla’ consideramos las afectaciones generadas durante la crisis de la COVID-19 e incluimos estos parámetros como un factor de priorización en las próximas inversiones públicas, con las cuales buscamos generar las condiciones para aumentar el empleo y la inversión privada, retomar grandes retos previos de la ciudad y superar conjuntamente las nuevas afectaciones que supondrán los efectos finales de la epidemia en nuestra ciudad. Para amortiguar el choque y acelerar la recuperación es importante la reactivación económica buscando aliviar y dinamizar el tejido empresarial; así como generar empleo, especialmente no calificado para poder menguar los efectos sobre el ingreso de la población vulnerable que será la más golpeada. De igual forma, la asistencia social es relevante para reducir los efectos de la crisis y consecuencias mucho más dañinas sobre los habitantes de la ciudad. Hemos realizado a la fecha la entrega de 446.670 auxilios alimentarios, con el fin de generar una acción inmediata sin ningún tipo de distingos, que permitiera garantizar el acceso a alimentos. Se priorizaron sectores de estratos 1 y 2 de nuestra jurisdicción y algunos sectores de invasión con población inmigrante en condición de extrema vulnerabilidad.

¿Le preocupa alguna situación hoy en particular hoy en Barranquilla?
La indisciplina social, combinada con el exceso de confianza, siguen siendo los mayores retos. Todos debemos cumplir con el distanciamiento físico, el uso del tapabocas para cubrir nariz y boca, y el lavado frecuente de manos. Depende de todos que de esto salgamos más fortalecidos.