Lo que ha quedado claro es que hay que rezar mucho y, debido a la gravedad de las heridas, pedir lo más cercano a un milagro para volver a contar con sus voces y sus luces en un escenario donde, pese a que cada vez que tiene oportunidad lo niega Petro, se encuentran representados todos los colombianos.
Tampoco importa que Petro se ausentara indefinidamente, incumpliera a quien sea, y dejara mal al país, continuará la tradición de que aquí no pasa nada, no importan las evidencias ni las pruebas, eso por aquí “nunca pegó”, menos durante este gobierno plagado de acusaciones delincuenciales, quien que esté limpio debe ser destituido, pues no encaja.
Ningún ministro le sirvió, y entonces quedó preso de su propio egocentrismo, sus fantasías desbordadas, y sus adicciones que lo movieron a tratar de gobernar, cosa que nunca aprendió, y el resultado es el desastre en el que se encuentra sumido el país.
Ahora se inventó un Cabildo Abierto en todas las ciudades comenzando, claro, por Barranquilla, por ser la ciudad natal de Mauricio Gómez y de Carlos Méisel.
El gobierno monta Consejos de seguridad, rechazos verbales, estériles anuncios de operativos para no repetición, imputaciones a granel, conmociones y decretos que nada solucionan; con o sin ellos todo igual, no pasa nada. Mientras, dirigentes y gremios siguen criticando a Petro con memes y mensajes aterrados.
Entonces ahí seguirá y pretenderá continuar su tarea destructiva, ya acabó con la salud, tiene diezmada y desmotivada a la fuerza pública, todos los días vilmente asesinan a soldados y policías sin que le merezca sino mezclarlos con datos fúnebres generales. Está destruyendo a Ecopetrol, acabando con el petróleo, el gas, y la economía, insertando mayorías en las cortes, pretende tomarse al país.
Las trampas vinieron una vez elegido, porque nunca supo hacer nada, no sabía cómo gobernar ni manejar el aparato público, así que, tal como en la desastrosa alcaldía, montó un equipo gubernamental de inútiles ignorantes que, ávidos de poder, empezaron a inventar barbaridades, y a engolosinarlo con la montada de trampas, según ellos, ingeniosas. Ahora todo es trampa
Fue un abanderado de la paz (Cómo será Santos de tramoyero que hasta al Papa engañó con su falsa paz), pero de la paz mundial alterada por conflictos entre países. Propugnó por la protección del medio ambiente, pidiendo cuidar la tierra, casa única de todos.
Pero hoy es Jueves Santo, día especial para perdonar y olvidar. Y para conmemorar el Santo Sacramento de la Eucaristía, y el Orden Sacerdotal. También para celebrar el triunfo de Noboa, y para lamentar la partida de Mario Vargas Llosa, la mejor y más prolífica pluma de América. Y claro, para hacer un paréntesis en las vacaciones, y meditar y orar por Trump, para que nos apoye contra Satanás. Y para rezar mucho por la suerte de este país que tanto necesita la oración.
Por ello es inútil hablarles de los aviones que alguna vez criticaron, o de algún otro desvarío; mienten porque mentir es un vicio, el vicioso no razona, sólo reincide. Así que hay que detener el avance destructor, porque la cosa no va a cambiar: el petrismo es como el puerco pollero.