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Saber que la cigüeña visitará una familia y llegarán cachorros a la casa es motivo de alegría. Sin embargo, este evento podría suponer un alto nivel de estrés en los animalitos, en este caso las hembras, por lo que será esencial que sus amos tengan en cuenta ciertas recomendaciones.

La médico veterinario María Cristina De la Puente manifiesta que como primera medida se deberán tener a la mano las ecografías abdominales que indicarán la fecha posible del parto. Los signos más comunes que anuncian que el momento ha llegado —señala la veterinaria— se manifiestan primero en la temperatura corporal.

Esta podrá tomársele con un termómetro digital, 'ubicando la punta metálica en el ano de la mascota. Luego se deberá esperar un minuto y si este llega a marcar por debajo de 38 grados centígrados, se podría suponer que la paciente está lista para dar a luz. Lo aconsejable es tomar la temperatura varias veces y comunicarse con su médico veterinario'.

Otra señal es el jadeo, así como la actitud inquieta de la mascota y la disposición de armar un nicho. Por tanto, será esencial que cuenten con un lugar libre de estrés, donde no haya mucho ruido, no se exponga a las crías y tengan privacidad para su correcto descanso. 'También tiene que ser despejado y fresco, sobre una superficie que perfectamente podría ser el piso cubierto con un periódico; las mantas podrían ahogar a los bebés. Se debe evitar que sea debajo de la cama porque es indispensable que los propietarios revisen a los cachorros y los gaticos con frecuencia'.

El momento esperado

Si los amos asisten al parto, De la Puente recomienda tener a la mano guantes, tijeras, nailon o hilo de coser, todo previamente esterilizado. Luego deberán esperar a que la hembra presente contracciones, que serán más llevaderas si se le hacen masajes en el estómago.

'Una vez salgan los bebitos, los amos podrán encontrarlos dentro de una bolsita (la placenta), que deberán abrir para sacarlos en caso de necesitarlo, pues normalmente este proceso lo hace la perra o la gata. Para cortar el cordón umbilical deberán medir una distancia de un centímetro, hacer un nudito con el nailon o con el hilo y por encima de este hacer un corte'.

Por su parte, el médico veterinario Ariel Mendoza especifica que 'normalmente las perras o las gatas se comen la placenta en medio del parto, y es importante que así sea porque les aporta proteína. En este proceso también rasgan el cordón umbilical, sin que se presente ningún sangrado (...) si la madre no lame a sus bebés, es ideal que el propietario tome una toalla limpia y los seque.

Luego, deberá poner a que la perra lama a cada uno porque con el lamido hará que los cachorros y los gaticos expulsen el líquido que tienen en la nariz y en la tráquea. Si no lo hace, lo mejor es llevarlos al médico veterinario'.

Se deberá tener en cuenta que si la perra o la gata expulsó su primer cachorro y en camino vienen otros más el tiempo máximo para esperar a cada uno será de dos horas, si lo excede lo más aconsejable es que recurran al especialista, explica la veterinaria.

Cuidado de la camada.

Es de gran relevancia –según De la Puente– que al momento en que los cachorritos y los mininos nacen se peguen a las tetillas de la mamá, sobre todo los primeros días porque 'encontrarán el calostro (primera leche que da la hembra después de parida), que es necesario para que refuercen su sistema inmunológico (...) deberán también mantenerse en un lugar fresco, sin aire acondicionado y sin abanico directo porque no cuentan con la capacidad de termorregular'.

'Mi recomendación principal es que las personas cuenten con un veterinario de confianza, que pueda asesorarlos en línea porque la vida de cada cachorro depende de la manera de cómo se manejó el parto y cómo fue su asistencia. Con el tema del coronavirus se puede recurrir a las consultas online, por WhatsApp o por llamadas telefónicas'.

Mendoza especifica que los bebés no deberán recibir ni leche de vaca, procesada, ni los preparados de leche en polvo, debido a que esto les genera cólicos y, a su vez, efectos secundarios.

'Lo más importante es que los cachorros reciban una buena alimentación, que tengan un crecimiento todos juntos, que se desparasiten a los 20 días de haber nacido, así como no destetarlos tan pronto. El tiempo mínimo es de un mes. También es necesario que reciban la primera vacuna dos semanas después de haberse destetado'.

Un caso

La barranquillera Yasmina Martínez, de 56 años, es propietaria de Luisa, una perrita mestiza, de pelaje beige y de tamaño mediano. Dice que logró asistirle dos partos, el último fue el 11 de septiembre del año pasado, en el que tuvo seis cachorros.

'Ese último fue difícil para ella porque jadeaba mucho. Recuerdo que no podía expulsar a uno de sus cachorros, así que me senté a su lado y le hice masajes en su barriguita, luego vi que no abrió el saquito, así que la ayudé a abrirlo, después empezó a lamer a su perrito. Más tarde la dejé que siguiera por sí sola, eso sí, estuve al pendiente de que continuara su parto como debía'.

Martínez explica que todos los cachorros sobrevivieron y que al nacer todos pudieron mamar de sus tetillas.