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Brasil es sinónimo de alegría, baile y sensualidad y Anitta es una personificación clara de lo que esto significa. Con sus movimientos cadenciales y ritmos pegajosos la brasileña se dispone a conquistar el mundo, como ya lo hizo en su país natal.

Videoclips como ‘Vai Malandra’ y ‘Paradinha’ muestran una artista fuerte, con carácter y sin miedo a causar controversia y al hablar con ella se muestra como una mujer dulce, dueña de su verdad y dispuesta darla a conocer a quien quiera escuchar. Además, apasionada por ser un buen ejemplo y defender sus ideales, entre ellos el respeto por comunidad LGBT.