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Los rumores de los que fue víctima la marca Pony Malta en las últimas horas por un nota de voz de Whatsapp y que obligaron a la empresa Bavaria a desmentirlos por medio de un comunicado emitido este miércoles, no son los únicos que han sacudido a las grandes marcas nacionales e internacionales.

EL HERALDO recuerda otras historias que se han transformado en un problema para las oficinas de las relaciones públicas de las empresas en las últimas décadas.

Para mediados de febrero de 1999, el país hablaba del caso del cadáver de un trabajador que fue hallado flotando en uno de los tanques de la Embotelladora de Santander (Embosan), pero a este rumor le agregaron que además, el trabajador tenía sida.

Algunos de estos comentarios que se tienden a viralizar han sido más dramáticos. En julio del 2004 se comenzó a regar como pólvora la historia del niño protagonista del comercial de Doña Gallina Mi Color, el cual decía que había muerto cuando su padre lo atropelló accidentalmente y luego, el papá del niño se quitó la vida por el dolor de lo ocurrido. Todo resultó una mentira, los padres del menor y la misma empresa, acudieron a los medios para desmentir la noticia y manifestar que el niño estaba más vivo que nunca.

Estos casos se ven en varios países. En junio de 1993 en Estados Unidos se conoció el caso de Pepsico, donde varias personas estaban alegando que habían encontrado una jeringa en el interior de las latas de la bebida gaseosa. El rumor significó una caída en la credibilidad de la marca, hasta que pronto se supo que una persona reportó dicho caso de manera fraudulenta, pues él mismo había ingresado la jeringa en su bebida. Esta acción había quedado captada en una cámara de seguridad.

Por lo general, estos comentarios malintencionados comienzan con una persona que genera el denominado voz a voz que terminan restándole credibilidad a la empresa.

Tenga presente

Muchas empresas, a raíz de este tipo de incidencias, han decido poner en práctica el marketing viral, que busca explotar redes sociales y otros medios electrónicos para producir incrementos exponenciales en reconocimiento de marca, que en un futuro le pueda permitir un aumento de sus ingresos, antes de creer en los rumores, se debe siempre mirar la procedencia de la información.