¿Alguna vez ha pensado en tener un árbol de mango, o una acacia o tal vez un caucho adornando la sala de su casa?
La técnica de cultivo del bonsái permite que convirtamos árboles de hasta 10 metros en réplicas miniatura, que pueden conservarse hasta cientos de años si se cuidan apropiadamente.
'Para hacer bonsáis lo primero que uno debe tener es paciencia', explica Francisco Vélez Carbonell, un barranquillero que lleva cerca de 40 años practicando este 'pasatiempo', alternándolo con la venta de equipos y maquinarias para construcción.
A sus 70 años pasados, Francisco, un hombre alto, calvo y con manos apergaminadas, ha cultivado cerezos, nísperos, laureles y cáuchos, entre otras clases de plantas pertenecientes a la región Caribe.
'Mi primer bonsái fue un laurel. Desde entonces he ido aprendiendo ténicas', asegura Vélez, mientras acomoda las materas con diferentes bonsáis, en el patio de su casa. 'Cuando llega el fin de semana, me desestreso trabajando en ellos', puntualiza, mientras comenta que el secreto es 'podarlos cuando hay luna menguante. No sé por qué, pero funciona porque hasta ahora todos están verdes', y con un solo gesto de su mano señala a todos los especímenes que le rodean.
Cuidados. Jhonny Olivella es un joven valduparense que desde los 11 años se sintió atraído por la creación de plantas en miniatura. A sus 26 años dicta talleres en el Museo Bolivariano de Arte Contemporáneo, en Santa Marta.

Francisco Vélez trabaja en el árbol de laurel que lo ha acompañado 40 años.
(Ver galería Bonsáis para ser creativos y pacientes).
En cuanto a las claves para hacer bonsáis en casa Olivella recomienda 'sembrarlo uno mismo para lograr una unión con él'. Una vez los 'cogollos'(plantas bebés) van germinando 'hay que dejarlos formar. Que tengan tronco, ramas y se vayan fortaleciendo'.
uando el árbol está crecido 'empezamos a podar las ramas y los trasplantamos. En esta fase les recortamos las raíces'.
Olivella recomienda 'usar tierra negra abonada rica en fósforo, hidrógeno y potasio', y trasplantar cada dos o tres años 'para controlar el crecimiento de las raíces'.
Con respecto a las diferentes técnicas japonesas para darles forma expresa que 'el bonsái es una oportunidad para desarrollar la creatividad. Con un alambre se puede lograr que una rama tome la forma que deseemos'.
'En cuanto a las personas que manifiestan que 'los bonsáis son atrofiaciones', Olivella contesta que lo que hacen es 'adaptar el árbol a unas condiciones de espacio reducido. La planta no sufre ningún daño', añade que por el contrario 'los bonsáis son mejor cuidados y protegidos que muchos árboles'.

Por sus hojas grandes, el caucho debe medir entre 80 y 100 centímetros.
Historia
Bonsái es una planta ornamental sometida a una técnica de cultivo que impide su crecimiento mediante corte de raíces y poda de ramas. Es una palabra de origen japonés, que surge de la unión de las palabras bon y sai, que significan literalmente bandeja y naturaleza, sin embargo su origen etimológico es chino y procede del término penzai, que significa pén = bandeja y zāi = cultivar).
Este arte se originó en China hace unos 2000 años, como objeto de culto para los monjes taoístas. Era un símbolo de eternidad porque el árbol representaba un puente entre lo divino y lo humano. Según la tradición, aquellos que podían conservar un árbol en maceta tenían asegurada la eternidad.
Fue llevado a Japón hace unos 800 años, donde se perfeccionó y evolucionó hasta las técnicas actuales.
Tamaños
De acuerdo con su tamaño los bonsái se clasifican en:
Shito o Keshitsubo: no mayor a 5 cm de envergadura, es posible transportarlo en la 'punta del dedo'.
Mame: de 5 a 15 centímetros de altura. Se le puede llevar en la 'palma de la mano'.
Shohin: de 15 a 21 cm.
Komono: de 21 a 40 cm.
Chumono: de 40 a 80 cm.
Omono: más de 80 cm.
Especies
En la costa pueden usarse diferentes especies de árboles y arbustos autóctonos. Los especialistas recomiendan:
-Trinitarias.
-Acacias.
-Tamarindo.
-Ciruelo.
-Guásimo.
-Guayacán.
-Pino dorado.
-Laurel.
-Caucho.
-Uvita o cordia alba.
-Cerezo.
Tipos
Existen diferentes estilos de bonsáis:
Vertical: El tronco es recto, con la usual silueta triangular.
Inclinado: No más allá de 45°, reconocible la silueta triangular.
Cascada: El ápice del tronco se encuentra claramente bajo el borde de la maceta. (Sola transplantamos mente en el ápice del mismo).