La cantadora de bullerengue y voz principal de la agrupación de música folclórica colombiana 'Las alegres ambulancias', Graciela Salgado, falleció hoy en Cartagena a los 83 años de edad, informaron sus familiares.
Salgado fue compositora y cantante de chapulas, bullerengues y fandangos y al igual que otras artistas de esos géneros, como Totó La Momposina y Petrona Martínez, recorrió con sus cantos varios países del mundo.
La artista vivió toda su vida en San Basilio de Palenque, a una hora de Cartagena. Era hija de Manuel Salgado, más conocido como 'Batata', el principal tamborilero que tuvo San Basilio de Palenque, conocido por tocar un tambor muy grande al que llaman 'pechiche' y que se utiliza durante los ritos fúnebres de los descendientes de esclavos africanos.
La cantadora heredó de su padre la vena artística y era la única mujer que tocaba el 'pechiche' sobre todo cuando celebraba el 'lumbalú', un ritual con el que los vivos le ayudan al recién fallecido a hacer su tránsito de la vida terrenal a la espiritual.

El nombre de su agrupación, 'Las alegres ambulancias' hace referencia al acompañamiento que las cantadoras palenqueras hacen del difunto durante nueve días con cantos, rezos, baile y el toque del 'pechiche'.
En San Basilio de Palenque, población declarada en 2005 por la Unesco como Obra Maestra del Patrimonio Intangible de la Humanidad, esperan hoy el cuerpo de Graciela Salgado para los rituales ancestrales con los que estos afrodescendientes despiden a sus muertos.
Entre las composiciones de Graciela Salgado están Makako mata el Toro (chalupa), He le le Valdés (bullerengue), Tres golpes (bullerengue), Pájaro de la mar (Fandango).
Cronistas la definieron como 'la única que puede cantar y a la vez tocar un tambor que la cubre por entero'. EFE