Los menores afectados cursan sus estudios en el Instituto Pestalozzi, pero se encuentran residenciados en este municipio. La Alcaldía ofreció cupos.
Los padres de familia aseguraron que desde el mes de noviembre no ven personas trabajando en las obras escolares.
Propiciar un ambiente adecuado para los menores no solo es una premisa que nos permite salvaguardar su integridad, sino que también les garantiza a los pequeños disfrutar de unos días de descanso felices dentro de sus hogares.
La protesta es realizada para rechazar el cierre de la institución educativa.
Los progenitores notaron cambios y señales de alerta en la menor, como un cambio abrupto en el estado de ánimo y desmejora en las calificaciones.