<p>Lluvias torrenciales entorpecían el miércoles la labor de los socorristas para alcanzar a un grupo de 12 niños y su entrenador de fútbol atrapados desde el sábado en una cueva inundada en Tailandia, mientras monjes budistas y grupos cristianos se acercaron al lugar para rezar por los menores.</p> <p> </p>