
La JEP entrega restos de desaparecidos en Sucre
El Movice cuestionó a la Fiscalía por las demoras en los procesos de identificación de los restos que han exhumado en San Onofre.
Cumpliendo con los compromisos adquiridos con las víctimas de desaparición forzada en el departamento de Sucre, este sábado los magistrados de la Sección de Ausencia de Reconocimiento de Verdad de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) entregaron los restos óseos de cuatro ciudadanos en los municipios de Tolú y San Onofre.
Las víctimas, un minero, un vendedor de frutas en las playas de Tolú, un bicicletero y un campesino sanonofrino, que desaparecieron en el marco del conflicto y cuyos restos estaban en laboratorios de la Fiscalía que los exhumó hace 16 años, fueron los entregados en dos ceremonias llenas de silencio, dolor y mucho llanto.

Alejandro Ramelli Arteaga, presidente de la Sección de Ausencia de Reconocimiento de Verdad de la JEP reconoce que en la entrega de estos restos ha habido una tardanza injustificada, pero “afortunadamente se dieron las condiciones y por el impulso que le dio la JEP al tema de los cuerpos que yacen en laboratorios de la Fiscalía General de la Nación y finalmente se lograron estas identificaciones, pero indudablemente fue demasiado tiempo”.
Por esta situación es que el magistrado en la audiencia del viernes le solicitó a la Fiscalía identificar los puntos de interés forense tanto en las fincas La Alemania y El Palmar como en los cementerios de San Onofre y Rincón del Mar y para ello le pidió realizar versiones individuales o colectivas de postulados del Bloque Montes de María de las AUC, así como tener en cuenta las versiones entregadas por los excombatientes de las Farc-EP.
La JEP también le solicitó al CTI de la Fiscalía presentar un cronograma de las acciones encaminadas a identificar los cuerpos que fueron exhumados en San Onofre y que reposan en sus laboratorios.
Con la presencia de la JEP en la Costa desde el jueves se realizó la entrega de 8 cadáveres, unos en El Carmen, Bolívar, y los otros en Sincelejo, San Onofre y Tolú.