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Gobernado por las pasiones que completan su creatividad, Rubén Trespalacios, el pintor del positivismo, ha logrado convertir su vida, que era un lienzo en blanco, en una obra magnífica que responde a la necesidad de ponerle color a la adversidad.

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Y es que alejado de pensar en que podría vivir de la pintura, el barranquillero creció sin pretensión alguna de convertirse en lo que es hoy, un pintor de tiempo completo.

Más allá de su disciplina y constancia, cualidades que lo definen muy bien, en Rubén las particularidades saltan a la luz, casi como el trabajo en sus cuadros. Sin embargo, a pesar de los matices y facetas la pasión es su determinante.

En dirección al arte

Su camino en la pintura comenzó desde que era muy niño, un par de dibujos sueltos y otros que parecían garabatos se fueron convirtiendo en parte de su día a día, para él era una forma más para divertirse.

'Para mí el dibujo y la pintura siempre han hecho parte de mi vida; de hecho en mi casa nadie se dedica a esto y para mí era solo algo que hacía por placer y en mis tiempos libres'.

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A pesar de no venir de una familia de artistas, su creatividad innata lo motivaba a construir universos nuevos, algunos más distantes que otros, pero todos llenos de un toque color.

Con el paso de los años el dibujo siempre se mantuvo presente en su vida, aunque su gusto por lo técnico y número también creció, tanto así que al graduarse del colegio decide estudiar ingeniería.

Transcurrido con normalidad comienza a trabajar en sus tema de ingeniería que luego de varias experiencias labores queda encargado de gestión de proyectos en diferentes zonas del país.

'Fíjate con el tiempo me fui a la otra orilla, dejé un poco el arte aunque me seguía gustando, y me dediqué mucho a mi trabajo del momento, a la gestión de proyectos masivos, pero en medio de eso la creatividad me volvió a encontrar porque en medio de tanto estrés lo que me ayudaba a desconectar era pintar'.

En ese momento todo se convertía en un lienzo para Rubén, desde una servilleta mientras esperaba embarcar un avión en el aeropuerto hasta los lienzos que comenzó a trabajar en casa.

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'Cuando empiezo a buscar un estilo propio me doy cuenta que el color siempre ha estado presente en mi vida, y sumado a eso me encuentro con unas investigaciones que hablaban de la psicología del color. Ahí se abrió mi mundo porque reconocí el poder de lo que nos rodea y como el uso de los colores influye en lo que hacemos'.

En esa perspectiva los lienzos se transformaron en casi que cualquier elemento, y un día decidió transformar una de sus pinturas en un morral, luego de llevar su diseño y que le avisaran que estaba listo para recoger, Rubén aprovecha su mal día en el trabajo para despejarse viendo lo que había creado.

Creando cosas nuevas

Estando en la tienda recibe su pedido y toda la fuerza del color se roba la atención de quienes estaban ahí; sin embargo, una conversación informal se convertiría en la oportunidad de llevar su arte a otros espacios.

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'Eso fue muy curioso, estaba en la tienda de Totto en Bogotá y se me acerca una mujer cualquiera, comenzamos a hablar de mi bolso, ella me manifiesta que le encanta mi trabajo y luego de eso se presenta como una de las representantes de la marca para Latinoamérica'.

Para ese momento ya Rubén había hecho de manera alterna un par de exposiciones de sus obras dentro y fuera del país, pero trabajar a una escala de gran superficie no, lo cual le representó un gran reto.

'Yo siempre he creído que el arte no tiene límites, y que este no debe seguir parámetros, por eso este tema de la colaboración con Totto ha sido excepcional, ver que el arte del positivismo y barranquillero está haciendo eco me llena de orgullo'.

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En su trayectoria el arte de Trespalacios siempre se destaca por el uso del color y las formas, pero todo en busca del equilibrio. Su mayor objetivo con el siempre es transmitir esa dosis de positivismo que todos necesitan.

Dentro de sus diferentes formatos de creación artística y el catálogo que presenta con Totto, morrales, paraguas, maletas de viaje, cartucheras, entre otros productos que muestran todo su talento.