Una de las dinastías que hace presencia este año en la edición 53 del Festival de la Leyenda Vallenata, es la de los Bolaño, la cual se ve representada por la acordeonera Madeleine Bolaño Escobar, participante de la categoría de Acordeoneras Mayores y su sobrino Edgardo Alonso Bolaño Gnecco, quien hace lo propio con sus notas entre los Acordeoneros Aficionados.
Ellos son descendientes del juglar de juglares, Francisco Irenio Bolaño Marzal, mejor conocido como Chico Bolaño, músico guajiro a quien se le atribuyen las primeras mezclas de pitos y bajos en la música vallenata y también la creación de los cuatro aires: puya, merengue, paseo y son.
Esta es la gran figura por la que se guían tía y sobrino, quienes este año quieren dejar inscritos sus nombres en la historia del certamen cultural más importante del vallenato, que este año debido a la pandemia encontró en la virtualidad su mejor refugio.
Madeleine fue la primera de las damas en inscribirse este año en su categoría. Esta valduparense, de 45 años, inició la contienda acompañada en la caja por Víctor Meriño y en la guacharaca por Yilianis Julio. Su único objetivo es obtener una corona que le ha sido esquiva.
'Desde niña comencé a concursar en diferentes festivales, incluido el de la Leyenda Vallenata, ocupando segundos y terceros lugares en la categoría Infantil y también Aficionado', dijo la mujer de cabello rubio que ayer apareció con un acordeón blanco, una blusa de mangas tres cuartas con lunares blancos, en fondo negro, que combinaban con el instrumento de viento.
A medida que fue creciendo Madeleine creó un grupo llamado Las Chicas del Vallenato, con el que logró hacer seis producciones, tres bajo el sello Discos Fuentes y las otras tres con Codiscos. Sin embargo, por falta de apoyo desistió del proyecto. 'No es un secreto que a las mujeres se nos ha complicado un poco incursionar en la música vallenata. Sin embargo, estuvimos insistiendo por más de 10 años con el grupo, pero finalmente las disqueras no nos respaldaron más. Yo he seguido tocando mi acordeón, amenizo parrandas, y este año he venido a reivindicarme en nuestro folclor con la corona en la categoría de Acordeonera Mayor', dijo la ganadora de festivales importantes como el Cuna de Acordeones en Villanueva (La Guajira).
Madeleine es uno de los retoños de Hidelmaro Bolaño, conocido como el ‘Decano del Acordeón’, hijo de Chico. Anteriormente venía haciéndole barra a su sobrino en el Festivallenato, pero con la apertura de la categoría femenina comenzó a prepararse y este año ambos están en la disputa. 'Siempre estamos compartiendo criterios y enriquecemos lo aprendido, unificamos criterios básicamente', dijo la experimentada digitadora.
'Para mí es un orgullo representar mi dinastía, sobre todo porque soy la única acordeonera de los Bolaño, mi anhelo es ganar y que la dinastía se vea bien representada, sé que lo voy a lograr con la ayuda de Dios. Tengo discos de mi abuelo Chico Bolaño que interpretaré como Catalina Daza, también algunos de Lorenzo Morales, Alejo Durán y Sergio Moya, soy amante de la nota raizal', agregó.
Sobre su herencia musical destacó que posee la cadencia tradicional y que conserva esa nota pura de principio a fin. Esa, sostiene, es su gran fortaleza.
Al preguntarle sobre lo que representa Chico Bolaño para ella, recalca que 'es el juglar más grande que ha tenido la música vallenata, él fue quien dividió los cuatro aires, un gran descubrimiento que nadie puede refutar, Chico con la marcación de los bajos hizo historia'.
En cuanto a sus contrincantes señaló que demostraron un gran nivel en su primera salida y por eso deberá sacar sus mejores notas en esta dura pelea, para convertirse en la nueva reina del acordeón'.