
“Para algunos es extraño que sea feminista”: Karol Solís
La internacionalista y politóloga cuenta sus luchas , su trabajo y su percepción sobre las problemáticas sociales del Caribe colombiano.
Desde que las mujeres se dieron cuenta que para llevar una vida digna era necesario levantar su voz, la sociedad, despectivamente, encontró la forma de minimizar sus luchas. A finales de los noventa se popularizó el término ‘feminazi’, un acrónimo de ‘feminismo’ y ‘nazismo’ —de la Alemania de Hitler— con la intención de desprestigiarlas.
Esta etiqueta se las han intentado poner a mujeres como Karol Solís Menco, politóloga e internacionalista, que incluso ni siquiera se atreve a repetir el término pues lo considera “infame e ignorante”.
“No concibo esa etiqueta, pero no es una novedad. En el tiempo siempre se ha buscado caricaturizar a las feministas como anti hombres, mujeres resentidas, llenas de odio, y nada más alejado de eso en la realidad. Se condenan las emociones de rabia e ira que expresan las mujeres, pero no se condena que nos matan, y esa es una de las desgracias de nuestras sociedades”.
La politóloga sostiene que “la única forma de combatir la desinformación es ofrecer y difundir información veraz”. Lo tiene claro, pues, desde su experiencia personal, confrontó la violencia de género “en múltiples formas”. Eso la impulsó a acelerar su necesidad de elevar la voz y hoy día ofrece cursos sobre feminismos y, a través de las redes sociales, genera contenido sobre estos temas y debates.
No tiene un punto exacto en el tiempo para situar desde cuándo se reconoce como feminista, pues explica que “ha sido un proceso largo y en constante evolución”. Sin embargo, Karol asegura que desde niña tuvo “una conciencia feminista”, pero “desde lo individual” pues veía que las posibilidades de desenvolverse en el mundo diferían con la de los hombres, pero “no las cuestionabada con contundencia”.
El feminismo lo estudió por primera vez como enfoque de investigación durante su pregrado en Ciencia Política en 2010. Seis años después, iniciando sus estudios doctorales, las preguntas sobre el movimiento eran cada vez más claras para ella: “Atravesaban mi vida personal, pero también eran inevitables en el quehacer de la investigación. Entonces con mucho más juicio y conciencia empecé a sumergirme en la teoría feminista y los estudios de género”.
Para la barranquillera, de 30 años, este movimiento ha sido “la respuesta a las preguntas más importantes que me he hecho en la vida desde mi experiencia como mujer”. Pero, para ella, “esas preguntas no son estáticas” y tampoco lo son sus posiciones: “creo en la necesidad de reformular las preguntas en el tiempo y evaluar con una mirada crítica las respuestas”.
Así ve al Caribe colombiano
Karol asegura que el Caribe es una región “profundamente machista, clasista y racista”. Por eso, para algunos, todavía les resulta extraño que ella asegure ser feminista: “Casi que les parece conocer a una nueva persona. Yo esto último lo leo en positivo, sería una pena profunda que uno se encuentre con la riqueza de la teoría y la vivencia feminista y ser igual o que la estructura de mi pensamiento no se hubiese transformado”.
Del Caribe también le preocupa el acoso, en particular el callejero. La magíster en Ciencias políticas considera que, aunque se está dando el debate, aún hay mucho por investigar y deconstruir.
“En una región como la nuestra a mí me preocupa profundamente porque se esconde el acoso detrás de la chabacanería, de esa frescura y ‘cercanía’ en nuestras interacciones. Detrás de esas interacciones supuestamente más cercanas entre hombres y mujeres hay todo un universo de acosos y microagresiones que a las mujeres les cuesta mucho denunciar, y, aún peor, les cuesta discernir e identificar”.
Por eso, Karol utiliza sus redes sociales para debatir sobre el Caribe y sus problemáticas. En abril, junto a unos colegas, creó PodCaribe, un espacio radial digital dedicado a los temas coyunturales de la región.
Además de su pedagogía digital, es académica de la Universidad del Norte. Institución de la que es egresada de sus dos pregrados y una maestría.
“El deseo de entender cómo funciona el poder y sus implicaciones está detrás de mi decisión por elegir este camino profesional, además de las posibilidades de que éste se use en función de dar respuestas a las luchas sociales que considero justas”.
En la Universidad encontró “muchas figuras” que ha admirado y mirado como referentes. “Tengo que mencionar a Alexandra García (q.e.p.d), que no solo creó el programa de Ciencia Política del que me gradué, sino que fue docente comprometida. Ella creyó en mí”.
Karol actualmente continúa en Estados Unidos y entre sus planes está regresar a Colombia a finales de 2021. Desea seguir en la academia y espera que sea como docente de planta en el departamento de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de su alma mater. Entre sus planes también tiene presente trabajar “con y por las mujeres del Caribe colombiano”.
Me confieso
“En mi etapa de bachiller me llamaba la atención los espacios de gobierno escolar y participaba. Era una estudiante indisciplinada en ese momento, entonces no pude lanzarme a personera e inicié una campaña por el voto en blanco como protesta. Un sinsentido, ahora que lo pienso, debí pensar en alianzas políticas”.
Su carrera
Es politóloga y profesional en Relaciones Internacionales de la Universidad del Norte. Magíster en Ciencia Política en modalidad de doble título de Uninorte- Universidad de Salamanca.
Fue periodista política y económica de EL HERALDO y actualmente es estudiante de doctorado en Ciencia Política en la Florida International University, en donde también obtuvo maestría y certificado en estudios latinoamericanos.