En el marco del anuncio de la terminación de los diálogos de paz, Humberto de la Calle, jefe negociador del equipo del Gobierno en los diálogos de paz con las Farc, manifestó ambas partes trabajaron en 'el acuerdo más viable'.
'Hemos llegado a la meta, la mejor forma de ganarle a la guerra fue sentándonos a hablar de paz. Seguramente no es un acuerdo perfecto, probablemente todos querían más y ambas partes de la mesa hubiésemos preferido más, pero lo que hoy se anuncia es el acuerdo más viable', expresó.
De la Calle indicó que la firma del acuerdo se convierte en una nueva oportunidad para comenzar una etapa de transformación en Colombia con cimientos en la reconciliación y la inclusión.
'El acuerdo del fin del conflicto no tiene dueño. No pertenece a los partidos ni al Gobierno, pertenece a todos los colombianos. La faena que sigue nos compromete a todos. Vendrán discusiones, ajustes y sacrificios. Necesitamos comprensión, altruismo, tenacidad y paciencia. Tenemos que asumir una responsabilidad como colectividad humana, en la que cada quien debe jugar su propio papel. No me refiero solo a contribuciones materiales', expresó.
'Por eso el plebiscito debe ser una decisión cívica, nacional y profunda', agregó.
El jefe negociador pidió a los colombianos tranquilidad ya que 'la mesa no fue un ejercicio de condolencias ni de intercambio de impunidades'.
'Muchos colombianos quisieran castigo para las Farc. Pero también con igual fervor deberíamos pedir el mismo castigo para todos los responsables. Agentes estatales que desviaron su misión y terceros financiadores de graves crímenes y masacres. La violencia del otro no puede justificar la violencia propia. Hay conflictos en la sociedad colombiana que tenemos que continuar afrontando con la fuerza tranquila y la legitimidad creciente del Estado. Ese es el camino que nos espera', expresó.
Dijo que no debemos limitarnos a celebrar el silencio de los fusiles, porque lo que realmente importa es que se abren caminos para dejar atrás la violencia y reconstruirnos desde el respeto.
'No quiero pedirles a los colombianos que confíen en la paz a ciegas. La firma de paz no es un salto al vacío', manifestó.
El delegado del Gobierno también señaló que este momento se convierte en una oportunidad para combatir la corrupción, la cual calificó como 'un cáncer que nos devora, arruina la legitimidad de las instituciones y Golpea duramente las finanzas públicas'.
'Es verdad que los circuitos de la corrupción comienzan en la política, en particular en la política local. Es allí, en el seno de las formas vigentes de gobernanza donde se gesta la corrupción', expresó.
De la Calle indicó que el veredicto final de este acuerdo lo tendrán los colombianos en las urnas, cuando voten en el plebiscito por la paz.
'Como delegados del Presidente de la República, el doctor Juan Manuel Santos, debemos esperar con humildad el veredicto de la ciudadanía. No vamos a caer en la arrogancia. Pero estamos tranquilos. Estamos confiados. Creemos haber logrado un pacto fundamental para la conveniencia del país. No hemos hecho propiamente una negociación. No hemos cambiado fusiles por convicciones', dijo.
Por último, el jefe negociador se mostró complacido de haber logrado en estos acuerdos de paz porque para él se convirtieron en 'un crecimiento espiritual' y porque gracias a ellos aprendió 'mucho de la capacidad de resistencia de los colombianos, de su generosidad y de su alegría'.