El Presidente Juan Manuel Santos rechazó este jueves el rapto de una niña de 10 años, ocurrido esta mañana en el municipio de Padilla (Cauca) y dijo que es un hecho que no se puede tolerar y desde que cualquier circunstancia se debe condenar en forma tajante.
Durante la firma del balón oficial de la campaña contra el Sida ‘Protege la Meta’, de la Organización de las Naciones Unidas, el Jefe de Estado dijo que la menor, hija del Comandante de la Policía en Padilla, fue retenida 'no se sabe por quién'.
'Y lo que quisiera decir es que estamos encima de esa situación. La Policía, el Ejército y la propia comunidad, todos están haciendo las investigaciones del caso. No se sabe todavía qué sucedió o quién es el responsable de haberse llevado esta niña de 10 años' señaló el Mandatario.
El presidente Santos dijo que no se ahorrarán esfuerzos para ubicar a los autores y devolver a la niña a su hogar.
'Pero no importa quién hubiese sido. Es un hecho totalmente condenable, censurable y no vamos a ahorrar ningún esfuerzo para ubicar el responsable y rescatar esta niña, devolverla a sus padres, porque el rapto de una niña de 10 años es un crimen que bajo cualquier respectiva no se puede tolerar y bajo cualquier circunstancia se debe de condenar en forma tajante'.
El Presidente confió en que esta situación se resuelva lo más pronto posible.
'Así me lo ha dicho el señor Director de la Policía (general Rodolfo Palomino), con quien me he comunicado ya en varias ocasiones el día de hoy, Y repito, no sabemos quién fue el responsable pero nos comprometemos a que esa niña regrese a su hogar lo más pronto posible', puntualizó.
Las autoridades buscaban el jueves a la pequeña hija de un sargento de la Policía, comandante de una estación en el sur de Colombia, que fue secuestrada por desconocidos cuando ingresaba a la escuela, se informó oficialmente. Por el hecho ya hay dos capturas. (ver noticia relacionada)
La retención de la menor se produjo a las 7 de la mañana en el municipio de Guachené, en el departamento de Cauca, explicó por teléfono a The Associated Press el coronel Iván Pérez, comandante de la policía en Cauca.
La niña tiene 10 años y es hija del sargento Víctor Cantoñí, comandante de la policía en Padilla, un municipio cercano a Guachené.