Primera condena en España por difundir “fake news” en Twitter
Se trata de un agente de la Guardia Civil española que atribuyó una agresión contra una mujer a un menor inmigrante.
El martes 8 de noviembre se emitió la primera condena en España por la difusión de fake news (noticias falsas) en la red social Twitter.
El tuitero condenado a quince meses de cárcel resultó ser un agente de la Guardia Civil de España, identificado como “J.M.”.
El hombre aceptó la condena ante un tribunal de Barcelona y reconoció que publicó un video con el que atribuyó a un inmigrante menor la autoría de una agresión que en realidad había sucedido en China.
La decisión judicial también incluye una multa de 1.620 euros, así como la prohibición de ejercer actividades docentes o deportivas.
El 1 de julio de 2019, “J.M.” publicó un vídeo que aseguraba correspondía a un abuso sexual ocurrido días antes en la localidad barcelonesa de Canet de Mar, e identificaba al agresor como un inmigrante menor que llegó a España sin la compañía de un adulto, conocidos en este país como "menas".
“Aquí tenéis el vídeo del mena marroquí de Canet de Mar, a esos que le vamos a dar la paguita hasta los 23 años, los niños de Pedrito Piscinas (en referencia irónica al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez). Por cierto, luego para más INRI la viola, estos energúmenos y estas manadas de marroquíes no saldrán en los medios”, se leía el ‘trino’.
El mensaje se producía pocos días después de que el Tribunal Supremo de España condenara a 15 años de prisión a cinco hombres españoles, que se habían autodefinido como "la manada", por agredir sexualmente a una joven en la fiesta de los Sanfermines, y que causó una gran movilización social.
El vídeo que incluía el mensaje, que fue visualizado 21.900 veces, mostraba a un hombre agrediendo brutalmente a una mujer e intentaba abusarla.
Sin embargo, la grabación era un vídeo de una paliza ocurrida en China que había sido difundido por las autoridades del país asiático para identificar a su autor mediante la colaboración ciudadana.
La defensa del procesado, “J.M.”, un agente de la Guardia Civil, pidió al tribunal que suspenda su ingreso en prisión, a lo que la Fiscalía se mostró favorable dado que carece de antecedentes penales, aunque exige que siga un curso de igualdad para librarse de la cárcel.
