El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo este miércoles que espera “bajar” aranceles a China porque cree que pueden ayudar a Washington “con la situación del fentanilo”, un día antes de su previsto encuentro con su par chino, Xi Jinping, en Corea del Sur.
Leer más: Cuba prevé que Melissa impacte en su oriente como un huracán “extremadamente peligroso”
“Espero bajar los aranceles porque creo que pueden ayudarnos con la situación del fentanilo”, dijo Trump a bordo del Air Force One tras partir de Japón rumbo a Corea del Sur, donde se reúne mañana con Xi.
“China va a trabajar bien conmigo, y vamos a hacer algo, yo creo. Tenemos que reunirnos mañana, y va a ser una gran reunión”, remarcó.
No olvide leer: Desvían un vuelo en EE. UU. después que un hombre apuñalara con un tenedor a dos menores
Trump aseguró hace días que lo primero que tratará con su homólogo chino será el tráfico de fentanilo que afirma originarse en el país asiático y que, según él, está empleando a Venezuela como parada intermedia antes de que la droga llegue a suelo estadounidense.
EE.UU. impuso aranceles del 20 % a las exportaciones chinas a cuenta del fentanilo, que se suman a otros gravámenes sobre la segunda economía mundial.
“Creo que van a hacer cosas (...) Tenemos que deshacernos de ello. Tenemos que pararlo”, afirmó.
Lea también: El huracán Melissa disminuye a categoría 4 a su paso por Jamaica
Trump ha hecho del combate al fentanilo una de sus grandes banderas y ha impuesto aranceles tanto a China como a sus vecinos, México y Canadá, a los que responsabiliza de la llegada de esta droga a territorio estadounidense.
El fentanilo es un opioide sintético con una potencia cien veces mayor que la morfina y cincuenta veces mayor que la heroína, que se utiliza con fines médicos pero es altamente adictivo y puede ser letal incluso en dosis muy pequeñas.
Estados Unidos lleva a cabo una campaña de operaciones contra el narcotráfico en el Caribe, y su Ejército mató la víspera a catorce personas tras atacar a cuatro lanchas que vinculó con el tráfico de drogas, en una operación en aguas internacionales del océano Pacífico, frente a costas de Colombia, según dijo el secretario de Guerra, Pete Hegseth.





















