
El superintendente de Industria y Comercio, Pablo Felipe Robledo, expresó ayer su preocupación por lo que está ocurriendo en torno a unas acciones de tutela impetradas por varios de los directivos de la Cámara de Comercio de Barranquilla, cuya dejación del cargo fue ordenada por la SIC días después de que declarara inválida la elección de la Junta Directiva actual.
En entrevista con EL HERALDO, el Superintendente dijo que le parecía sospechoso que instauraran un recurso jurídico ante una instancia que no es competente para tutelar a una entidad del orden nacional descentralizada, como es el caso de la SIC.
De acuerdo con el funcionario, las acciones de tutela fueron radicadas ayer ante el Juez 22 Civil Municipal de Barranquilla, que no tiene la competencia para revisar las decisiones proferidas por la Super.
En su concepto, el juez competente tampoco es el de Barranquilla, porque las resoluciones de la SIC son actos proferidos en Bogotá y, por consiguiente, la violación del derecho se produce en ese ente territorial.
“Son unas tutelas bastante sospechosas, porque se presentan ante un juez Civil Municipal, que es el juez de inferior jerarquía dentro de la rama judicial. Y la Superintendencia es una autoridad del orden nacional, que cuando la van a tutelar, lo tiene que hacer ante un juez que tenga rango de circuito porque, de acuerdo con la Ley, es una entidad del orden nacional descentralizada por servicio”, explicó Robledo.
Ante estas circunstancias, el Superintendente advirtió que lo que está por venir es una decisión que va a dejar sin piso lo ordenado por la SIC, en el sentido de que los directivos elegidos el pasado 5 de julio debían apartarse de esos cargos.
“Ellos van a buscar que ese juez, en este procedimiento de primera instancia, eche para atrás la decisión de la Superintendencia. Pero estamos tranquilos porque algún día lo vamos a ganar en la Corte Constitucional, cuando se revise la acción de tutela. Pero las acciones se fallan en 10 días, la apelación es en el efecto devolutivo, lo que quiere decir que la decisión hay que cumplirla.
Luego, en Barranquilla lo que va a terminar ocurriendo, gracias a esas tutelas, es que la Junta será reintegrada, van a parar el proceso electoral, lo van a demorar más y durante mucho tiempo estas personas, que fueron elegidas en un proceso espurio, van a seguir manejando la Cámara de Comercio de Barranquilla”, manifestó Pablo Felipe Robledo.
En su concepto, la presentación de estas tutelas lo que va a hacer es complicar la situación en la Cámara, si se tiene en cuenta que la institucionalidad de la entidad ha sido afectada, y en Barranquilla, porque es la imagen de la ciudad la que está en juego.
“Vamos a notificarnos y a defendernos. Vamos a conseguir muy rápido una decisión judicial favorable, y en algunos meses vamos a poder tumbar ante otros jueces esas decisiones”, expresó.
El Superintendente dejó en claro que lo sospechoso no es que se instaure una tutela, el problema es que la presenten delante de una autoridad judicial que no es competente para estudiar este tipo de decisiones.
“Nos van a bailar el indio, como se dice coloquialmente, y no me está oliendo bien este tema”, agregó.
También advirtió que a la fecha no está en firme la decisión de la SIC, porque algunos de los directivos han evadido la notificación. Sin embargo, consideró que este proceso ya se había cumplido porque aquí rige la notificación por conducta concluyente.
Pese a toda la situación que se está presentando en torno a las tutelas, el superintendente de Industria y Comercio, Pablo Felipe Robledo, espera que el Juez 22 le dé la razón a la SIC y quede en firme la decisión de dejar sin cargos a la junta invalidada por las irregularidades detectadas en las elecciones.
Por Redacción Economía