Entre los niños y jóvenes el coronavirus ha dejado sentidas grietas. Además del inminente riesgo de contagio, esta crisis sanitaria ha tenido una profunda repercusión en su bienestar, creando una serie de miedos a pesar de que poco a poco hemos ido recuperando algunos de los hábitos que habíamos abandonado a causa de la cuarentena.
En reiteradas oportunidades, los especialistas médicos han expresado que los niños y los adolescentes cuentan con las mismas probabilidades de infectarse que cualquier otro grupo de edad y pueden propagar la enfermedad, aunque el virus causaría una infección más leve que en otras personas.
Tan solo en Barranquilla, según las cifras de la Secretaría de Salud, se han reportado 6.184 casos positivos entre menores de 25 años, lo que corresponde a cerca del 19,6% de los casos totales (31.624, a corte del 7 de agosto).
'Este ha sido el comportamiento esperado para Colombia. Desafortunadamente las poblaciones jóvenes y adultos jóvenes cursan asintomáticos', indicó Humberto Mendoza, secretario de Salud.
Y aunque en el imaginario colectivo se encuentra vigente que todos los fallecidos han sido personas de edad avanzada, en la capital del Atlántico se reporta que –a corte del 7 de agosto– 12 personas menores de 25 han muerto a causa de esta enfermedad, lo que corresponde al 0,8% de los decesos totales.
'Esto no es un juego. Muchos jóvenes creemos que esto no nos va a tocar nunca y cuando lo hace, es un choque muy fuerte para uno y, por supuesto, para toda tu familia', sostuvo una joven de 21 años, que durante más de un mes estuvo luchando contra el nuevo coronavirus.
Desde la administración distrital se viene trabajando con estrategias educativas y de comunicación para esta población, con el principal objetivo de desterrar aquella falsa creencia sobre la inmunidad de los más pequeños ante este virus, así como concientizar sobre la posibilidad de que puedan llevar esta enfermedad a sus padres o abuelo.