'La pólvora no es un juego', esta frase la ha escuchado en reiteradas ocasiones Nelson, un menor de 13 años, que sufrió una quemadura de primer grado en el abdomen, producto de un ‘tiro’ que se encontró en la calle.
Sin embargo, relata su madre, que fue la curiosidad de niño la que provocó que resultara afectado, pues en su 'inocencia lo recogió del suelo y se lo guardó en su cintura'.
El caso se registró la noche del miércoles 10 de diciembre en Palmar de Candelaria, corregimiento de Luruaco con una población cercana a los 3.000 habitantes, que en su mayoría se dedican a la agricultura, y cuyas necesidades básicas están insatisfechas.
Según cuenta Merlina González, madre del menor, ese día había pedido a su hijo que le hiciera un mandado a la casa de su abuela, pero en el camino se encontró un ‘tiro de mecha’.
'Nos dicen que es un tiro, que no explotó, de esos que aparentemente salen defectuosos, y a él se le hizo fácil recogerlo del suelo y guardarlo en la cintura', contó la madre del menor.
El pequeño de 13 años escucha con timidez a su madre y luego con los ojos fijos en su abdomen dice que fue muy doloroso, pues sintió mucho ardor.
Según el niño, a los pocos minutos de tener el ‘tiro’ en su pantalón empezó a sentir que se quemaba, luego se lo sacó y salió corriendo para su casa.
'Al principio no lo llevamos al puesto de salud, lo tratamos con remedios caseros', dijo la madre que le aplicó vinagre en la zona afectada, pero al otro día el niño siguió con el dolor y lo llevó para que recibiera atención médica.
Merlina enfatizó que las quemaduras son leves. Sin embargo, dice que le han recalcado el peligro de jugar con pólvora, y que la próxima vez que se encuentre algún artefacto no debe recogerlo.
'Desde que prohibieron la pólvora, las tiendas del pueblo ya no venden chispitas, ni tiros, pero eso quién sabe de dónde lo traerían', dice la mujer.
Pese a lo sucedido, la alegría en esta casa permanece. Nelson es el tercero de cuatro hermanos de un hogar humilde. Su madre se gana la vida vendiendo sopa y su papá es albañil.
Pese a su edad aún tiene la inocencia de un niño de seis años, y conserva la ilusión de que el Niño Dios le traiga una bicicleta.
Sobre el caso, la secretaria de Salud del Atlántico, Celia Cruz Torres, manifestó que este caso no lo tenían reportado, pero dijo que le hará un seguimiento. Aseguró que hasta el momento solo tiene conocimiento de una niña que se quemó con una vela el pasado 8 de diciembre en Santa Lucía.
Para esa fecha el Hospital de Santo Tomás reportó dos quemados con pólvora (un adulto y una menor), lo que quiere decir que son tres las personas quemadas con pólvora en lo que va de las fiestas de diciembre.
A pesar de las permanentes campañas que realiza el Gobierno para evitar el uso de la pólvora, los casos siguen registrándose y, lo que es peor, 'es que son menores los que resultan perjudicados', dijo Cruz Torres.
El año pasado en el departamento del Atlántico cinco menores terminaron quemados con pólvora.
La Región Caribe reporta hasta el momento 13 personas quemadas en lo que va del mes de diciembre, de acuerdo con el reporte de las autoridades. De esta cifra, diez son menores de edad y tres adultos.
Por departamentos, Magdalena y Atlántico registran el mayor número de afectados con tres cada uno, le siguen Córdoba y Sucre que tienen dos casos cada uno. Cesar, La Guajira y Bolívar han tenido un solo caso cada uno.
A nivel nacional, la cifra asciende a 186 personas quemadas, siendo Antioquia, con 57 casos, el departamento que más registra ciudadanos quemados con pólvora.
A Antioquia le siguen Valle del Cauca y Cauca, con 21 y 12, respectivamente.