'Busco colegiala hermosa, con buen cuerpo, para tener relaciones a cambio de dinero. Absoluta reserva, escribe al mail (…). Envíame tu número telefónico y, si puedes, una foto'.
El clasificado está exhibido en la página co.mileroticos.com, que promociona los servicios de mujeres 'ardientes' y 'complacientes' en Barranquilla, 18 municipios del Atlántico, Bogotá y los 32 departamentos del país.
Hasta aquí nada luce extraño porque la pornografía con adultos no es delito. El problema es que la Policía de Infancia y Adolescencia descubrió que a la sombra de varios de esos avisos estaban los Depredadores, una presunta banda de proxenetas con menores de 12 a 17 años desarticulada con apoyo de la Fiscalía y el CTI.
'Hacían reclutamiento individual a través de redes sociales (...)', declaró el jueves en rueda de prensa el coronel Édgar Muñoz Villamizar, subcomandante de la Mebar. El portal web era, de hecho, uno de los canales de comunicación directa entre el grupo y clientes.
En ocho allanamientos en Barranquilla y Soledad fueron capturados el miércoles Lorena Muñoz Niebles, Ricardo o Rachelí De la Hoz Sandoval, Álvaro Salas Cuadro, Fernando Arias Orozco, y los hermanos Carmen, Franklin y Rolando Pugliese Camargo. En Pivijay (Magdalena) cayó Juan Carlos Cantillo Palacios. (Ver infografía Zonas donde actuaban los proxenetas).
Durante los 17 meses que duró la investigación quedó al descubierto cómo, dónde y por quiénes eran reclutadas las menores; la forma en que las explotaban; que los malos entornos familiares y personales de algunas facilitaba los intereses de los señalados proxenetas; las ‘condiciones’ que debían cumplir para ingresar al negocio y hasta los planes de expansión internacional que tenía la red.
EL HERALDO conoció, en fuentes oficiales, detalles de este caso sin precedentes en el Atlántico, que expone una grave situación en la que la prostitución infantil es el último eslabón de una cadena que mezcla hogares disfuncionales, problemas de conducta, drogadicción, consumo de alcohol y deserción escolar.
Mensaje de texto, la génesis. En mayo del año pasado, una mujer denunció ante el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) en el Atlántico que su hija se había ido de la casa, pero conocía su paradero: una vivienda en el Centro, donde sospechaba que la explotaban.
Con esos datos, el Bienestar ofició a policías de Infancia y Adolescencia que la localizaran. Al llegar, los funcionarios fueron recibidos por Lorena Muñoz Niebles, conocida como la Mona, quien estaba con una hija y otras dos menores ajenas a su núcleo familiar.
Una de esas era la hija de la denunciante, cuya preocupación venía de días atrás cuando descubrió varios mensajes de texto en el celular de la adolescente. En especial, uno en el que se leía: 'Te tengo la vuelta lista (cliente), te recogen a las 2 (pm). Ponte bonita'.
Confrontada por las autoridades, la menor no solo confirmó los temores de su mamá. Reveló que conocía a otras chicas que también se vendían por dinero.
La Policía empezó entonces a relacionar informaciones de menores evadidas y allegó cuatro denuncias formales más a la investigación.
En todas las entrevistadas identificaron a más menores de distintos barrios y teléfonos desde los que eran contactadas. Entre los celulares había uno que también se anunciaba en co.mileroticos.com como contacto para interesados. Lo manejaba Fernando Arias Orozco.
Esa línea y otras tres fueron interceptadas con el aval de un juez. Lo que quedó grabado es más que comprometedor: conversaciones de una red de proxenetas independientes, que se identificaban cada uno como ‘presentador’ o ‘presentadora’, compartían jovencitas, zonas donde las captaban y clientela.
'Con las llamadas se llegó a contar 200 víctimas, todas mujeres, en Barranquilla y su área metropolitana', destacó una fuente que conoce os detalles del caso.
Comisiones y fiestas. Los Depredadores tenían dos estrategias para cazar a sus víctimas. Una era la 'búsqueda en establecimientos públicos como discotecas, bares, estancos, en la vía pública, en el entorno de algunos establecimientos educativos y en centros comerciales', explicó el coronel Muñoz.
Según las pesquisas, en esas funciones participaban activamente Ricardo o Rachelí De la Hoz, en discotecas del barrio Simón Bolívar y el municipio de Soledad; Cantillo, en alrededores de colegios en Soledad; y los hermanos Pugliese, en el barrio El Santuario, discotecas de las localidades suroriente y metropolitana, y Soledad.
Las negociaciones y citas eran asunto exclusivo de clientes y proxenetas. Los montos estaban establecidos por edades. Las de mayor edad, por ejemplo, no alcanzaban a cobrar $1 millón y a cada explotador le correspondía de $80 mil a $150 mil.
'Entre más pequeñas y vírgenes, desde 12 años, más caras: entre $1 millón y $5 millones', contó un investigador. 'La cuota por ‘presentador’ llegaba hasta 50% de la ganancia'.
Es justo en esta parte del entramado criminal que surge la otra modalidad de reclutamiento: las mismas adolescentes recibían una comisión de hasta $100 mil por cada niña nueva.
Los testimonios y las interceptaciones permitieron a las autoridades conocer además que varias pasaron una especie de ‘casting’: tener relaciones sexuales con Arias 'para saber si le servían o no al negocio', indicó otra fuente.
Arias, apodado Javier, era administrador de un local de computadores en Parque Central, el cual fue allanado el miércoles en busca de material pornográfico y catálogos magnéticos.
Una vez dentro del mercado, las jóvenes podían tener por día hasta tres citas y acumular ganancias de $1 millón. Aunque el movimiento era todos los días, se incrementaba de jueves a domingo.
Había clientes de varias ciudades, pero para la red eran inaplazables los viajes a las Fiestas del Mar en Santa Marta, el Festival Vallenato en Valledupar y Cartagena, debido al gran flujo de turistas, en especial extranjeros, que genera.
El señalado de encargarse de los traslados es Cantillo, quien administra en Pivijay el estadero La Tormenta. De ahí que las menores también frecuentaban este municipio del Magdalena, donde los principales interesados eran ganaderos.
Con tantas evidencias los Depredadores lucen acorralados. Por un lado, la Fiscalía evalúa no solo acusarlos en juicio por proxenetismo y utilización o facilitación de medios de comunicación para ofrecer actividades sexuales con menores de edad, ya que analiza otros cargos por trata de personas y abusos. Y por otro lado, la ley penal prohíbe rebajas de penas por delitos con víctimas menores de edad, ni siquiera para allanamientos o preacuerdos.
El portal de pornografía co.www.mileroticos.com, que según las autoridades era usado por ‘los Depredadores’.
Los aseguran en cárceles
Un juez de control de garantías impuso medida de aseguramiento intramural a las ocho personas detenidas. A los hermanos Pugliese, Cantillo, Arias, Salas y De la Hoz los envió a la Penitenciaría de El Bosque; a Carmen Pugliese y Lorena Muñoz, al reclusorio para mujeres El Buen Pastor.
La audiencia comenzó el jueves a las 2:30 de la tarde y culminó el viernes hacia las 10:40 de la noche, con recesos. Los detenidos fueron imputados por los delitos de proxenetismo y utilización o facilitación de medios de comunicación para ofrecer actividades sexuales con menores de edad. A los tres hermanos Pugliese, además, concierto para delinquir.
Testimonio
'Una amiga fue la que me llevó': Joven - 18 años, Barranquilla
EL HERALDO habló por teléfono con una joven que se inició en la prostitución, de la mano de una amiga que trabaja para un miembro de los Depredadores. A sus 18 años continua en el oficio de escort (acompañante) y, bajo reserva de identidad, accedió a contar cómo fue reclutada y algunos detalles del oficio.
¿Por qué tomó esa decisión?
A mí me convenció una amiga con la que estudié en el colegio. Ella ya estaba en el negocio con toda esta gente, me convenció y fue la que me llevó.
¿Cómo la convenció?
Me insistió varias veces en que si necesitaba ganar dinero nos fuéramos de paseo a Santa Marta con unos tipos que pagaban todo. Al principio no quería, hasta que me convenció.
¿Y por qué sigue?
Por necesidad. No terminé el bachillerato y no veo otra forma de ganarme tanta plata, y tan rápido.
¿Cuánto gana?
A veces, $1 millón por día.
¿Con un solo cliente?
No. Hay veces en que, por cada niña, tenemos hasta tres clientes en un solo día.
¿Qué clase de clientes?
De todo tipo. Jóvenes, de 30 o 40 años, más viejos. Profesores, muchos profesores.
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Penalidad
21 años de prisión es la sanción que ha impuesto la Corte Suprema de Justicia en procesos por el delito de proxenetismo.
De 14 a 25 años de prisión
es la condena que prevé el Código Penal colombiano para el delito de proxenetismo con menor de edad.
De 10 a 14 años de prisión
es la pena por utilizar o facilitar medios de comunicación para ofrecer actividades sexuales con menores.
