A Natalia Abello Vives no le tiembla la voz cuando habla de la titánica misión que acaba de asumir. En las manos de esta abogada barranquillera, que sellan sus palabras con gestos terminantes, está la misión de subsanar el atraso histórico de la Región Caribe en infraestructura; o al menos, reducirlo un poco.
Santos la designó como ministra de Transporte en reemplazo de la cienaguera Cecilia Álvarez-Correa. Las herramientas de Abello ante el reto son una asignación de $7 billones en el presupuesto de 2015 y su experiencia de 22 años en la administración pública.
En una oficina de la Alcaldía de Barranquilla, donde venía ejerciendo como secretaria general desde 2012, habló con EL HERALDO sobre los tramos pendientes de dobles calzadas; el fantasma del 'empaquetamiento' en la licitación del aeropuerto Cortissoz; la solución para evitar que el mar se trague el kilómetro 19 de la vía B/quilla - Santa Marta, y la participación costeña en el Gobierno, además de la suya.
P. ¿Cuáles serán sus prioridades en el Ministerio?
R. Sacar adelante las inversiones de más de $50 billones que contemplan las concesiones de cuarta generación (4G). Son corredores estratégicos, carreteras en doble calzada, modernas, con unas condiciones de seguridad diferentes a las que tenemos en el país en este momento.
P. ¿Cómo va este proceso?
R. Ya en la primera ola tenemos seis adjudicaciones hechas, dentro de las cuales tenemos en el Atlántico una muy importante, la que tiene la conectividad de Cartagena con Barranquilla y la Circunvalar de la Prosperidad. La prioridad en infraestructura es seguir impulsando la ejecución de la obra pública. A partir de 2015 nos queremos comprometer a hacer 300 kilómetros de doble calzada anual durante el cuatrienio.
Esto es una meta muy exigente, pero sabemos que la podremos cumplir. Nos quedan tres licitaciones que estaremos adjudicando en el corto plazo, de manera que podamos empezar a ver obra pública en un año. Vamos a hacer el segundo paquete de obras a través de APP, vamos a iniciar este año. Estaremos adjudicándolo a mediados del año entrante. Para junio estaremos hablando de la segunda ola.
P. ¿Cómo garantizar que se ejecute efectivamente?
R. En el primer cuatrienio del presidente Santos se realizaron inversiones en el Atlántico del orden de $2 billones. Nos hemos fijado una meta superior a eso. El Departamento requiere mucho más. Hemos hecho una revisión detallada de qué viene, qué nos hace falta y cuál es el compromiso para buscar el financiamiento. Tenemos la doble calzada de Cartagena-Barranquilla, los 73 kilómetros del medio que no están contemplados en la adjudicación que se hizo.
Tenemos pendiente el puente Pumarejo. En diciembre de este año iniciaremos la etapa licitatoria. Abrimos prepliegos para que sea una realidad tener adjudicada la construcción en el primer trimestre de 2015, por una inversión que supera los $640.000 millones.
Estamos en los trámites de licenciamiento ambiental. Tenemos la carretera que va de Barranquilla a Ciénaga a la que le falta la doble calzada también. Requiere un poco más de detenimiento en la medida que pasa por el parque Isla Salamanca.
La solución que estamos viendo es hacerla a través de unos viaductos e integrar la necesidad de proteger el parque con la competitividad de la vía. Es importante porque esa es la conexión que tiene Barranquilla con el interior del país, con Bogotá. Hoy tenemos una vía con una sola calzada con unos problemas puntuales en el kilómetro 19 que vamos a atender de manera inmediata.
P. ¿Qué van a hacer allí?
R. Se ha planteado a través del concesionario hacer por vía de obra pública una solución de carácter temporal, no definitiva, con un enrocamiento. La solución que se había dado en el pasado no funcionó. La idea es hacer una inversión de $4.500 millones, a través de recursos que pondríamos del Gobierno nacional para acometer la obra. Revisaremos el tema para jalonar los recursos de manera que se puedan hacer las obras urgentes que requiere el kilómetro 19. Tenemos que hacerlo, porque si no podemos quedar incomunicados. Eso ya está anunciado y ya los recursos están en proceso.
P. ¿Por qué algo temporal?
R. Porque la solución definitiva es el viaducto. Requiere unos diseños, unas obras de mayor envergadura, y dejaríamos resuelto de manera definitiva el tema de la erosión. Pero en este momento el objetivo es contener la emergencia. Para hacer viaductos requerimos hacer un trazado, un diseño, que nos va a tomar mayor tiempo. Y seguramente cuando estemos listos para el diseño ya no vamos a tener vía. Por eso estamos trabajando en paralelo.
P. ¿Cómo resolverá los 73 kilómetros pendientes entre B/quilla y C/gena?
R. Ya le hemos pedido al concesionario actual una solución a través de una APP privada. Hemos dicho preséntennos un estudio y hágannos una propuesta para solucionar los 73 kilómetros en el corto plazo. Es decir que en esta administración quede resuelta la doble calzada. Del lado de Ciénaga-Barranquilla seguramente haremos una combinación de obra pública y modificación de la concesión. Pero eso todavía está un poco más atrasado en estudios por el tema de Isla Salamanca. Pero quiero reiterar que en la agenda de la ministra está darle a la ciudad su doble calzada en todo el corredor Santa Marta - Barranquilla - Cartagena.
P. ¿Por qué quedó incompleta la concesión?
R. Lo que pasó fue que según los estudios de tráfico, Barranquilla- Cartagena por la autopista del mar no tiene tráfico sino de vehículos livianos. Entonces la inversión de los 73 kilómetros del centro no cerraba financieramente con los peajes que estaban incluidos. Lo que se decidió fue priorizar las entradas.
P ¿Cuándo habrá concesionario para el Cortissoz?
R. Nos hemos comprometido con unas fechas concretas en la licitación, que se aperturará en septiembre. La adjudicación la haremos hacia finales de este año. De manera que unas inversiones del orden de más de $300.000 millones se puedan realizar en el aeropuerto el próximo año.
P. ¿Por qué hay que esperar por otros aeropuertos?
R. El aeropuerto nunca estuvo con condicionamientos económicos. Lo que se trató de hacer fue generar un incentivo económico para los preclasificados que estuvieran interesados en presentar oferta conjunta por el Cortissoz y el grupo de aeropuertos del Suroriente, que están en el mismo proceso licitatorio. En la medida que hubo oposición de la ciudad, se decidió eliminar esos incentivos, de manera que las propuestas que se presenten con la apertura de la licitación sea de manera absolutamente independiente, que no solamente no tengan el vínculo económico, que nunca lo han tenido, sino que no haya ningún incentivo en la puntuación para que puedan ofertar de manera conjunta.
P. ¿Es decir que desde el Ministerio velará por los intereses de la Costa?