Esta sí que era una 'serpiente de tierra caliente' como la de la canción infantil. Eso seguramente fue lo que pasó por la mente de los moradores del sector de la calle 82 con carrera 53, que ayer presenciaron un hecho sin precedentes, cuando a las 12:45 del mediodía observaron a una boa que se arrastró y se escondió en la parte inferior de un carro rojo que se encontraba estacionado fuera de un local comercial de venta de ropa femenina.
Ante el asombro de los transeúntes, que no daban crédito a lo que observaban, varios curiosos dieron aviso a la Policía. Mientras que la propietaria del vehículo entró en pánico al escuchar las versiones de quienes aseguraban que bajo el capó de su automóvil se refugiaba una boa constrictor.
Tras la llegada de los agentes de Policía, la masa de curiosos aumentó hasta rodear el carro, que tuvo que ser alejado del andén para facilitar las labores de rescate de la especie, que fue trasladada hasta el CAI Harvy, conocido como 'la estación de Villa Country'.
Sin saber con exactitud el tamaño del reptil con el cual se iban a encontrar, los representantes de la autoridad recurrieron a diferentes maniobras para sacar al animal, del cual se desconoce la procedencia, ya que de acuerdo con la bióloga Astrid Mercado, si bien es una especie nativa de Latinoamérica, no es usual su supervivencia en entornos urbanos.
'En una ciudad con el clima de Barranquilla es muy raro encontrar apariciones de especies de este tipo, pero el tráfico ilegal las ha convertido en mascotas exóticas de los amantes de la vida reptil, por lo que no es descabellado pensar en la posibilidad de que haya escapado de la casa de un coleccionista de serpientes', precisó la experta.
Pese a que el mayor peligro que representan las serpientes de este tipo es su poder de 'estrangulamiento' y presión que ejercen sobre sus presas, que usualmente son ratas o murciélagos, para evitar accidentes fue puesta a disposición de la Policía Ambiental.
De acuerdo con testigos del hecho, la boa medía entre 90 centímetros y un metro. Una 'visita' sorpresa que detuvo el tráfico por unos minutos en el norte de la ciudad. EMA